Por distintos motivos, pero los votos ayer de PP e IU tumbaron la intención del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Zaragoza de destinar los 3,4 millones de euros del remanente del año 2013 al pago de la deuda con los bancos. Finalmente, el PSOE se quedó solo en su propuesta --Chunta se abstuvo-- y esta cuantía quedará, al menos de momento, en el limbo, dado que la ley tampoco permite destinarla a otra cosa.

El expediente se debatió en el pleno municipal que tuvo lugar ayer y en el que se aprobó también la decisión de pedir al Ministerio de Hacienda una prórroga para devolver el exceso en la participación de los ingresos del Estado de los ejercicios 2008 y 2009. También en este caso, el ahorro se destinará al pago de la deuda a los bancos.

No ocurrirá lo mismo con el remanente del año 2013. IU reclamó que el consistorio se niegue a que el destino de ese dinero sean los bancos e instó al resto de los grupos a votar en contra. "No haga usted ahorros o si no acabará en los bancos", reclamó al vicealcalde Fernando Gimeno. "Dejen los remanentes sobre la mesa, súmelos a los del año que viene, apóyenos para cambiar la ley y que nos permita gastar este dinero en otras cosas", indicó Alonso.

El PP, por su parte, reclamó la retirada del expediente al considerar que la decisión de destinar estos 3,4 millones a amortizar un crédito de Ibercaja, el que tiene un interés más elevado, según detalló Gimeno, debía estar avalada por un estudio económico y financiero inexistente en la documentación aportada por el Gobierno municipal. "Pedimos que retire el expediente o votaremos en contra. Hoy decidimos que se amortizan 3,4 millones sobre un global de deuda de 800, sin un estudio económico que diga cuál es la opción más ventajosa", detalló el concejal del PP Jorge Azcón. Finalmente, y aunque con argumentos distintos, tanto PP como IU rechazaron la amortización de los remanentes al crédito de la entidad aragonesa. No fueron suficientes los diez votos del PSOE para aprobar la propuesta.

MÁS PLAZO Sí hubo mayor consenso para elevar al Ministerio de Hacienda la petición de aplazar a 20 años el pago de los excesos de ingresos de los años 2008 y 2009. Solo IU decidió abstenerse, también precisamente por el destino que deberán tener los 5 millones de euros que el consistorio podrá ahorrar cada año al prolongar el plazo hasta el 2031: el pago a los bancos.

Ahora habrá que esperar a ver si el ministerio considera que Zaragoza cumple con los requisitos para esta prórroga. En principio, había dudas sobre el nivel de endeudamiento municipal --se exige que no se supere el 110% y lo hace-- pero una disposición adicional abre la mano a que se conceda esta moratoria al tener un plan de deuda aprobado.