La Educación ha vuelto a convertirse hoy en un arma política en el Parlamento aragonés, donde la diputada popular María José Ferrando y la consejera de Educación, Mayte Pérez, se han reprochado mutuamente falta de interés real por llegar a un pacto educativo estatal y, por ende, en la comunidad autónoma.

Pérez ha comparecido hoy en el Pleno, a petición de Ferrando, para dar su opinión sobre el proceso y últimos acontecimientos en los trabajos llevados a cabo por la subcomisión creada en el Senado para la consecución de un Pacto Nacional por la Educación.

Tras los partidos catalanes, el PSOE anunció el pasado 6 de marzo que abandonaba la subcomisión, y después lo hizo Podemos, con lo que este órgano trabaja ahora solo con PP y Ciudadanos.

Ante este foro, que ha trabajado "en armonía" durante más de un año, según Ferrando, han comparecido más de 80 expertos, y el ministerio ha ofrecido un compromiso de financiación estable para la educación.

Pero el PSOE, ha lamentado, ha decidido volver al "no por el no" del secretario federal de la formación, Pedro Sánchez, y abandonar la subcomisión.

A su juicio, es "absolutamente falso" que el PSOE se haya levantado de la mesa "por una cuestión de financiación", porque si fuera así, el PP en Aragón también debería abandonar la comisión de estudio que trabaja en las Cortes para intentar llegar a un pacto educativo autonómico, ha explicado.

El PSOE y el Gobierno de Aragón, se ha preguntado, "¿van a participar de la premeditada estrategia de imposición ideológica de Sánchez o van a continuar trabajando por un pacto?".

La consejera ha reprochado al PP, por su parte, su oportunismo y ha advertido de que para lograr un pacto es necesario no hacer "trampas", poner "las cartas boca arriba" y no generar falsas espectativas.

La forma "más saludable" para iniciar un pacto, ha agregado, es que el Gobierno no renuncie a sus competencias y lleve la iniciativa, algo que a su juicio el PP no hizo.

Pero además, ha lamentado que cuando hay que adoptar un compromiso "real", y poner financiación sobre la mesa, el Gobierno de España "mira hacia otro lado".

Por eso ha hecho hincapié en la importancia de hablar de financiación en esa subcomisión, porque el Gobierno español quiere "detraer" lo que cuesta el pacto educativo de las aportaciones que hace a las comunidades, dentro de su política de "invito yo, pagan las autonomías".

Ha explicado, en este sentido, que desde que Mariano Rajoy llegó al Gobierno central el peso de la educación en el PIB ha bajado un uno por ciento, y en los presupuestos de 2018 se prevé que este sea de un 3,7 % cuanto en 2010, con José Luis Rodríguez Zapatero, era de un 4,8 %.

Porque la financiación es especialmente importante, según ha detallado, para comunidades como Aragón, donde el 95 por ciento de las escuelas abiertas están ubicadas en localidades de menos de 5.000 habitantes, y ese 95 % prestan servicio a tan solo el 18 % del alumnado aragonés.

Por el resto de grupos, Erika Sanz (Podemos) ha recordado que la subcomisión no cuenta con la comunidad educativa y ha lamentado que se estableciera que cualquier acuerdo tuviera que salir adelante con tres quintas partes de los votos, lo que supone que ninguna iniciativa podría ser aprobada sin el apoyo del PP.

A su juicio, la subcomisión no es más que un intento del PP de "ganar tiempo" para implantar definitivamente la Lomce y que "gane la legitimidad que nunca ha tenido", cuando ni siquiera ha estado dispuesto a debatir que se garantice que el presupuesto para Educación llegue al 5 % del PIB.

María Herrero (PAR) ha recordado que para llegar a acuerdos es necesario "querer y ceder", y ha considerado que los enfrentamientos que se han dado hasta ahora han sido por asuntos "accesorios y superfluos".

La portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, también ha coincidido en que hay que dejar de centrar las cosas en cuestiones no principales, como son a su juicio la concertada, la religión o "las faldas de los uniformes" y ha hecho un llamamiento para que la educación deje de ser un "arma política".

La socialista Margarita Périz ha lamentado que el PP ponga la estabilidad presupuestaria e ir a Bruselas con los deberes hechos por delante de la Educación y por CHA, Gregorio Briz ha advertido de que "cualquier irresponsabilidad" en materia educativa significa "sacrificar a un generación"