El aeropuerto de Teruel y la empresa Biocurve han resultado ganadoras de la fase nacional del Premio QIA, una competición internacional cuyo objetivo es impulsar proyectos innovadores en las empresas y organizaciones. El aeropuerto de Teruel es el mayor centro de estacionamiento y plataforma aeroportuaria de Europa. Por su parte, BioCurve, ubicada en Zaragoza, ha desarrollado la primera caldera que, sin equipos externos, aúna los beneficios medioambientales de la biomasa.