El santoral tiene sus ocasiones. Ayer tocaba encomendarse a la Virgen del Perpetuo Socorro. A la sazón, patrona del cuerpo sanitario del Ejército, que se celebraba con premios en el hospital Militar de Zaragoza. Jesús Rubio Izquierdo, general médico director del centro, se encargó de presidir la jornada, junto al alcalde, Juan Alberto Belloch, el Justicia, Fernando García Vicente, el consejero de Política Territorial, Antonio Suárez, y el fiscal jefe, José María Rivera. Y, ante ellos, un intenso programa, desde la marcha de Infantes a las salvas.

Cambiaban las tornas en algunos casos. Llamaba la atención la posición de los expertos en protocolo de varias instituciones, que siempre están al quite sin que se les vea. Ayer, por un día, marcaron posiciones en su propia foto. Ana Belén Abadías Bergua, José Óscar López Navarro y Marta Garasa Domínguez, de los servicios de Protocolo de DPZ, Departamento de Presidencia y Justicia de la DGA, y Ayuntamiento de Zaragoza, respectivamente, se convertían en premiados del día por su trabajo, por su colaboración. Pero hubo más: la Academia de Medicina, las hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, que prestan su labor en este hospital, la Unidad de Radiología del mismo, que dirige Martínez Madrid, el catedrático Miguel Ángel Boldova... A sus premios se sumaron medallas, cruces de mérito, como las que recibieron Fernando Gutiérrez López, Juan José Monge, Julián Javier Bodeguero, Juan Antonio Lara, Alejandro Valverde, Ángel González López, Lourdes Alonso, María Eugenia Marquina, Ángeles Rodrigo, Isabel de Lucas y Rafael Alcalde. Hubo premios al personal militar y civil (desde Francisco Tomás Salinas, a Alfredo Busián, Pedro Ignacio de la Iglesia, Pilar del Río, Ángeles Primicia...) Hubo un largo etcétera. Fotos, aplausos... Reconocimientos a la salud de la patrona.