El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha defendido hoy la gestión de su Gobierno durante los dos primeros años de legislatura, en los que, "consciente de su debilidad parlamentaria", ha intentado ser "coherente y no sectario", "leal" con el Estado y demostrar que es un "apasionado con las ideas de libertad e igualdad".

Así ha concluido Lambán su intervención en la primera sesión del debate sobre el estado de la comunidad que se celebra en las Cortes de Aragón, donde se ha mostrado orgulloso de haber recuperado los servicios públicos y "los derechos maltratados en la legislatura anterior".

Su Gobierno, ha insistido, estimula la creación de riqueza "para repartirla con justicia a través de servicios de calidad"; es "defensor acérrimo" de los intereses de Aragón a través del cumplimiento del Estatuto; "está concernido por los problemas de la humanidad en su conjunto" pero, a la vez, "resuelto a competir con éxito en el mundo globalizado"; es "leal a España, con exigencia de reciprocidad", y le ofrece "todo su apoyo frente al desafío secesionista de Cataluña".

Lambán ha comenzado su intervención haciendo un repaso de los, a su juicio, problemas más acuciantes a los que se enfrenta la sociedad en su conjunto.

Además de los derivados del cambio climático -"amenaza cada vez más real que se cierne sobre la supervivencia misma de la vida", según ha dicho-, el presidente se ha referido a la "desigualdad creciente", que considera el "segundo problema más importante" y "de dimensión planetaria", y al "terrorismo yihadista" que golpeó recientemente a Cataluña.

Pero también al "populismo" y la "crisis de la democracia extendida por todo el globo", con manifestación "especialmente dañina y grotesca en la mismísima Casa Blanca", y a la crisis del proyecto europeo, que se enfrenta a las incertidumbres generadas por el "brexit" y al euroescepticismo.

A todo ello, dentro del catálogo de preocupaciones globales de Lambán, se suma la corrupción, el "goteo incesante" de casos y detalles de desfalcos públicos que se fraguaron en plena crisis económica y que tienen un efecto "demoledor" sobre la credibilidad de las instituciones.

Pero en Aragón, según su presidente, el "elenco de casos de talento y de éxito" sirve para "poner un punto de esperanza" en el "demoledor panorama" del momento histórico actual.