El Servicio de Prevención y Salud del Ayuntamiento de Zaragoza alerta de de la existencia de varias deficiencias detectadas en la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), ubicada en la planta calle del consistorio, en la plaza del Pilar. En su informe se incluyen carencias pendientes de subsanar desde el 2002.

La mayoría de los incumplimientos está relacionados con el reducido espacio del que disponen los trabajadores y la distribución del mobiliario. El texto expone que sería necesio contar con una sala de espera amplia, aumentar la separación entre las diferentes mesas de trabajo, y crear un eSpacio donde colocar los archivadores de los expedientes. El documento hace especial hincapié en la necesidad de tener habilitadas zonas donde atender a los usuarios «salvaguardando el derecho a la privacidad y confidencialidad».

Por otro lado, entre las carencias detectadas destaca la ausencia de medidas para «la prevención, protección y control» de situaciones de situaciones conflictivas que puedan producirse, como «posibles agresiones verbales y físicas o actitudes amenazantes que puedan suponer un riesgo potencial para la seguridad de los trabajadores». Por otro lado, tampoco existe un protocolo de evacuación ni se han hecho simulacros, por lo que recomienda que se diseñe un plan de emergencia y se forme a sus empleados. Este informe se redactó el pasado mes de junio y sus trabajadores denuncian que desde entonces no se ha hecho nada para tratar de atajar los problemas detectados.

BALANCE / Actualmente, la plantilla de la OMIC está formada por un auxiliar administrativo, dos técnicos auxiliares y el puesto de dirección. Cuatro personas frente a las once que había en el 2010.

La oficina municipal, junto a los puntos de información al consumidor repartidos por los barrios, atendió el año pasado un total de 40.556 incidencias, un 11,4% más que en el año 2016, cuando fueron 38.860.

Una tendencia al alza que se repite desde hace años. Por ejemplo, en el 2015 las atenciones fueron 38.771 y en el 2014 alcanzaron las 34.350.

El grueso se realiza de forma presencial y por teléfono, y la mayoría está relacionada con problemas con la banca (18.970 de las 40.556 totales) y las compañías de teléfono (6.263). Le siguen las atenciones referidas a vivienda (3.739), seguros (2.782) o energía eléctrica (2.188).

Desde la llegada de Zaragoza en Común (ZeC), la OMIC ha vivido varios cambios en su estructura. El año pasado se trasladó a la sede a la calle Boterón durante cuatro meses y pese a las críticas de sus empleados. Finalmente, se volvió a instalar en la plaza del Pilar.

También en la calle Boterón, antigua sede del Plan Integral del Casco Histórico (PICH), sus empleados denunciaron deficiencias en sus instalaciones. Ahora reclaman que se adecúen los espacios para poder atender a los usuarios respetando el derecho a la privacidad.