Los partidos aragoneses echaron anoche el telón, con diversos actos festivos, a la campaña electoral de las europeas, la primera que en los últimos años se celebra sin el trasvase del Ebro como principal argumento de ataque al adversario político. Quizá sea el entierro definitivo del trasvase o el cansancio por una convocatoria electoral que ha llegado en el momento más inoportuno, sólo tres meses después de las anteriores generales, lo cierto es que las últimas dos semanas se han movido sin tensión y con la indiferencia de buena parte del electorado. En las últimas horas, los candidatos centraron sus mensajes precisamente en motivar a los ciudadanos a que vayan a votar mañana domingo con el fin de combatir el temido fantasma de la abstención.
La primera campaña sin el trasvase ha salido de su letargo en contadas ocasiones. Ni siquiera la presencia en Zaragoza de José Luis Rodríguez Zapatero, Mariano Rajoy y Gaspar Llamazares, consiguió atraer de forma masiva a sus fieles y los lugares en donde se celebraron los mítines no se llenaron. Una de las novedades de esta campaña ha sido la celebración por primera vez en muchos años de debates electorales. Aunque en el caso del celebrado en Televisión Española en Aragón, no asistió la candidata del PSOE, Inés Ayala, en respuesta a la negativa a acudir al mismo de Luisa Fernanda Rudi. Sí lo hicieron Modesto Lobón, el número 35 de la lista del PP, junto a Juan Manuel Ferrández, del PAR, José Miguel Díaz, de CHA, y Miguel Angel Gracia, de IU.
Tres citas electorales
Nadie puede reprochar a los candidatos que no se hayan empleado a fondo en llevar su idea de Europa por muchos rincones de la comunidad, pero su mensaje no ha logrado calar en ciertos sectores de un electorado, cansado, tras un año marcado por tres citas electorales: autonómicas y municipales en mayo del 2003, generales y europeas.
La socialista Inés Ayala, tras acudir a Zuera y Epila, cerró la campaña en Madrid, junto al presidente aragonés, Marcelino Iglesias. Ambos asistieron al último mitin del cabeza de lista Josep Borrell. Ayala mostró su confianza en el "europeísmo demostrado" de la sociedad española y en su capacidad de movilización para que vayan a votar el próximo domingo, a pesar de que algunas encuestas apuntan hacia una alta abstención. "Creo que en la recta final, y gracias al ejercicio de pedagogía, tanto de medios de comunicación como de políticos, hemos conseguido lograr sensibilizar de que votar para Europa es muy importante para Aragón".
Mientras tanto, Rudi, en su último acto como candidata, remarcó que los socialistas han acabado introduciendo la "crispación" en esta campaña electoral tras conocer los resultados de las últimas encuestas, y ver que "están perdiendo gas". La candidata popular calificó de "pedagógica" la campaña realizada por el PP, en la que se ha hecho especial hincapié en el trabajo en dos pilares, la llamada "UE de los Estados y la UE de los ciudadanos, porque es necesario que la Unión la conformen estados fuertes y por eso es importante, y compatible, defender los intereses de España".
Izquierda Unida, en el cierre de la campaña electoral, hizo un llamamiento a evitar la abstención porque lo que se decide en los comicios del domingo es "muy importante" para España. "Si triunfa la abstención, la democracia muere un poco", subrayó Gracia.
Los representantes de los dos partidos aragonesistas, PAR y CHA, aprovecharon la última jornada para arremeter unos contra otros. Así, el presidente de CHA, Bizén Fuster, criticó al PAR por haber convertido a su partido en el eje de su campaña electoral y tratar "materias ajenas" a estos comicios: "Parece que el PAR se haya presentado a elecciones en Cataluña". El candidato del PAR, Juan Manuel Ferrández, remarcó que su partido ha sido el único que ha presentado un proyecto "creíble" para Aragón en esta campaña electoral mientras PP y PSOE se habían enzarzado en una "revancha" de las generales y CHA había "malcopiado" sus propuestas.
