El principio de acuerdo al que han llegado el equipo de Gobierno de Zaragoza en Común en el Ayuntamiento de la capital aragonesa con PSOE y CHA para sacar adelante los presupuestos de 2017 ha tensado hoy el inicio de la Comisión de Economía en la que se van a debatir las enmiendas.

Una sesión en la que el primer paso ha sido aprobar el voto particular de Zaragoza en Común para retirar de la modificación de plantilla de 2017 las catorce plazas del 010, uno de los principales escollos que han lastrado la negociación de las cuentas del actual ejercicio.

Ha sido este debate el que ha tensado los discursos entre el consejero de Economía, Fernando Rivarés, y el portavoz del PP, Jorge Azcón, quien cuestionaba que el voto particular hubiera sido firmado por el concejal de Vivienda y Deportes, Pablo Híjar, quien ha ejercido esta semana de portavoz de la Comisión de Servicios Públicos y Personal, en sustitución de su presidente, Alberto Cubero, de baja por paternidad.

Cuando Azcón ha cuestionado la imparcialidad de los técnicos municipales, Rivarés le ha aconsejado aplacar la "ira" a lo que el edil popular le ha respondido: "métase la ira donde le quepa".

Rivarés ha dado cuenta asimismo de las veintiún enmiendas y las dos parciales que no han sido admitidas del PP y las veintitrés de Ciudadanos.

Dado que el acuerdo con PSOE y CHA, que en total habían presentado 500 enmiendas, ha derivado en una transacción de 35 y se van a someter a votación el resto, PP y C's han solicitado un receso de la Comisión para poder estudiarlas.

El motivo ha sido la falta de tiempo para analizar el resultado, puesto que el principio de acuerdo ha tenido lugar poco antes de comenzar la Comisión.