El sonido de la jota y el retumbar de tambores y bombos se unirán hoy en la procesión de las Lágrimas de la Cofradía del Descendimiento.
"Noche la de Martes Santo / toque sordo de tambor / lágrimas por la calle / comienza la procesión". Zaragozanos de todas las edades volverán a escuchar esta noche estos versos en una de las principales citas que para hoy reserva la agenda de la Pasión en la capital aragonesa. Una noche que promete tener sabor oriental y olor a incienso.
La hermandad del Descendimiento, que tiene su germen en el colegio de los Jesuitas, predicará sus cinco lágrimas en un largo recorrido por las calles de la ciudad que le llevará a pasear desde Cardenal Gomá hasta la iglesia de San Cayetano a su paso titular y a su Virgen, una obra que es de la Escuela de Salzillo de la que según dicen los expertos es una réplica del Descendimiento del pintor holandés Rubens. Esta obra de la Virgen, en la que aparece llorosa, es del siglo XVIII.
Esta recorrerá las calles de la capital aragonesa acompañada de otras siete figuras escalonadas que el escultor bilbilitano José Alegre copió en 1847 de un lienzo del citado artista flamenco que cuelga de las paredes de la catedral de Amberes.
En la procesión, los asistentes podrán disfrutar de los toques sordos de los distintos tambores y de los bombos y de más versos, esta vez, en honor a la Virgen como el siguiente: "Dolorosa Virgen madre / no llores que no estás sola / todos estamos contigo / en estas penosas horas". Estos momentos se compaginarán con otros de silencio.
MAS CITAS Los ciudadanos podrán disfrutar de otro momento de interés en esta noche de Martes Santo que es el que ofrecerá el recorrido de la Cofradía del Cristo Abrazado a la Cruz a su llegada al noviciado de Santa Ana, cuyas hermanas dedicarán cánticos al paso titular.
Los zaragozanos tienen también otra cita, la salida de la Crucifixión, hermandad de herencia franciscana cuyo espectacular paso del Calvario (obra del autor bilbilitano José Alegre) contrasta con la sobriedad de la peana del Crucificado y que cuenta con numerosos fieles en la parroquia de San Antonio.
