Stop Desahucios se concentró ayer por la tarde ante una oficina bancaria del Coso de Zaragoza para denunciar la situación de Isaac y Elizabeth, una pareja en paro y con dos hijos pequeños cuyo desalojo fue suspendido el 22 de mayo, pero que está nuevamente programado para el 25 de julio. Según explicaron fuentes de la plataforma, la pareja ha visto subastada su casa y ha quedado aún así con una deuda de 90.000 euros, más 2.000 de un crédito.
