La provincia de Teruel se enfrenta la segunda ola de coronavirus con un solo vehículo para el traslado de pacientes contagiados de covid-19 en sus más de 14.000 kilómetros cuadrados de extensión, mientras que durante el confinamiento de primavera contó con dos unidades, una en la capital turolense y otra en Alcañiz, pese a que el número de casos fue muy inferior.

Así lo ha denunciado este viernes el comité de empresa de la UTE Transporte Sanitario de Aragón en un comunicado en el que piden a la Consejería de Sanidad del Ejecutivo regional aumentar el número de unidades y mejorar las condiciones del transporte sanitario urgente.

En el comunicado, el comité de empresa detalla que el único vehículo destinado para el traslado de pacientes con covid-19 funciona únicamente doce horas al día y destaca que esto obliga a utilizar durante el resto del tiempo vehículos que tendrían que estar destinados a otro tipo de urgencias.

"Estos vehículos, una vez finalizados los traslados de pacientes con covid-19, deben ser desinfectados, proceso que dura una hora y deja vacía la zona de actuación de ese vehículo", lamentan los denunciantes.

En ese sentido, desde el comité de empresa de la UTE Transporte Sanitario de Aragón han indicado que los profesionales que trabajan en esos vehículos están soportando "una gran carga de trabajo" y han señalado que, "en muchos casos", esa carga está agravada "por los estragos de la primera ola, que agotó a muchos de los profesionales".

"Queremos destacar la baja incidencia por la covid-19 entre los trabajadores, lo que demuestra, que aún en las peores condiciones, dan lo mejor de sí mismos", han añadido, insistiendo en que un único vehículo para toda la provincia es "insuficiente a todas luces, tal y como está la situación".