El ambicioso proyecto de los arquitectos Luis Franco y Mariano Pemán para recuperar el casco histórico del Arrabal creando pisos sociales y abriendo los patios de manzana al público no verá la luz. El Ayuntamiento de Zaragoza ha descartado esta opción por "falta de tiempo" ya que en los cuatro años que distan del 2008 (fecha en la que se pretendía tener reconvertido el sector para conmemorar el bicentenario de Los Sitios) no es posible tramitar los expedientes de adquisición de suelo, reordenar las manzanas, levantar los nuevos espacios y poner en marcha el programa de reactivación social propuesto por los arquitectos.

La intervención en esta zona degradada del Arrabal se acometerá de forma mucho más sencilla y "más rápida". El espacio comprendido entre la calle Sobrarbe, Germana de Foix y la plaza San Gregorio pasa a formar parte de un Area de Rehabilitación Integrada (ARI), en la que se prevé involucrar financieramente al Ministerio de Fomento, el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza.

"El proyecto de Franco y Pemán, ganador del concurso Celebration of Cities , era muy bonito y vanguardista, pero algo teórico, costoso y complicado", explicó Elvira Adiago, arquitecto del área municipal de Planes Integrales. "Se tendrán en cuenta sus ideas para reordenar las manzanas pero, en líneas generales, la actuación consistirá en crear unos itinerarios históricos por el casco histórico recuperando los alzados y revitalizando la zona con pequeños comercios y puntos de artesanía", añadió.

Según expuso la arquitecto en una jornada informativa organizada por la Asociación de Vecinos del Arrabal, "de lo que se trata es de crear, de aquí al 2008, unas rutas con el ornato necesario para no avergonzarnos de nuestra ciudad delante de los turistas".

Momentos antes de la exposición, un grupo de técnicos municipales y representantes de la Sociedad Municipal de Rehabilitación (SMR), el concejal de Planes Integrales, Agustín Martín (CHA), vocales de la Junta de Distrito del Rabal y miembros del colectivo vecinal visitaron el casco histórico para conocer in situ su estado. Los expertos coincidieron en señalar la importancia de los patios interiores y la necesidad de recuperarlos aunque, según hizo constar el arquitecto de la SMRU Juan Rubio, "los principales problemas son la adquisición de los suelos (los propietarios se niegan a vender o piden cifras elevadas) y la falta de conexión con zonas de actividad económica ya que no puede basarse la recuperación en los usos residenciales". La reforma de edificios tratará de impulsarse con un convenio municipal de ayudas a particulares.