"Sólo es un aplazamiento, los gastos básicos se cubren". De esta manera, el alcalde en funciones de Zaragoza, Miguel Gargallo (CHA). trató ayer de zanjar la polémica suscitada por el anuncio de la suspensión de pagos por parte del consistorio. El nacionalista tildó de "muy aventurado" afirmar que los recibos retrasados hasta septiembre se eleven a 52 millones de euros y atribuyó el "desequilibrio" económico del consistorio zaragozano a la gestión del PP en las dos anteriores legislaturas. "El Partido Popular está empeñado en dar a entender que hay una alarma en este ayuntamiento por paralizarse los pagos, cuando en realidad sólo se ha priorizado qué pagar cuando la liquidez está limitada. Hasta que se apruebe el plan en septiembre se aplazan pagos de proveedores", dijo el alcalde en funciones en declaraciones a Europa Press. Miguel Gargallo cargó contra los populares asegurando que hacen un "flaco favor" transmitiendo una sensación de alarma económica. "El Ayuntamiento de Zaragoza está abonando los gastos de personal, la Seguridad Social y los gastos básicos hasta donde hay liquidez, todo aquello que se puede asumir, según lo determina el área de Economía y Hacienda", sostuvo el nacionalista.En cuanto al plan económico que se empezará a aplicar en septiembre, Gargallo argumentó su necesidad en la existencia de un "presupuesto deficitario y una ley de estabilidad que impide aumentar la deuda y gastar pasivo si no hay equilibro". El edil zaragozano insistió en que el PP es el "gran responsable" de este déficit que se arrastra.