Los integrantes del equipo de Gobierno PSOE-CHA en el Ayuntamiento de Zaragoza retoman esta semana la negociación del plan económico financiero de estabilidad presupuestaria, que incluye una espectacular subida fiscal en el IBI --23,75%--, la basura --42,5%-- y el agua --18%-- para el 2005, e incrementos adicionales en estas dos últimas tasas para el 2006. Antes de las vacaciones de agosto, los socios de la coalición pactaron este aumento de los tributos básicos, pero quedan por cerrar otros aspectos, como la adopción de medidas para el recorte del gasto corriente un 1,5%.

El Gobierno convocará un pleno extraordinario el próximo mes de septiembre para aprobar este programa económico. La medida está obligada por ley, ya que el municipio cerró con un déficit de 18 millones de euros el ejercicio del 2003.

La aprobación del plan es imprescindible también para poder captar los nuevos créditos bancarios previstos en el presupuesto del 2004 y conseguir así liquidez para las arcas municipales. El dinero en efectivo escasea, hasta el punto de que el alcalde, Juan Alberto Belloch, tuvo que decretar una interrupción de los pagos no urgentes a finales del mes de julio.