El grupo municipal del PSOE en Zaragoza ha solicitado que se amplíe la gratuidad del transporte público, autobús y tranvía, a todos los zaragozanos que van a trabajar en actividades esenciales durante el estado de alarma. Los socialistas han manifestado su apoyo a la medida implantada ya para el personal de centros sanitarios y de residencias de la tercera edad, pero consideran necesario ampliarla a otros ciudadanos que tienen que desplazarse por la ciudad para acudir a su puesto de trabajo.

"Es de justicia que Zaragoza se vuelque con todos los zaragozanos que estos días tienen que acudir a trabajar para garantizar los servicios esenciales al resto de ciudadanos. Hay trabajadores de tiendas de alimentación, ópticas o farmacias a los que no les queda otro remedio que coger el autobús o el tranvía. En estos momentos, nadie viaja en transporte público por ocio", han asegurado los ediles en un comunicado. Asimismo, consideran que esta propuesta podría ayudar a fomentar la utilización del transporte público, cuyos usos han caído de manera significativa por la crisis sanitaria.

Los concejales socialistas Alfonso Gómez y Ana Becerril se han reunido de manera telemática estos días con representantes y usuarios del transporte público de la ciudad "con el objetivo de recoger sus preocupaciones y propuestas para afrontar las consecuencias económicas y sociales" que generará la crisis sanitaria del covid-19. Además, el grupo municipal también está elaborando un Plan de Recuperación Económica, en el que se contemplarán medidas concretas por al menos 30 millones de euros.

En el marco de estas sesiones, el sector del taxi también ha trasladado al grupo municipal socialista su preocupación por la pérdida de ingresos durante estas semanas, según cuenta el propio partido, y ha planteado algunas posibles iniciativas para afrontar "el día después". Entre otras propuestas, señalan la necesidad de llevar a cabo campañas de promoción para fomentar el uso del taxi o la posibilidad de alcanzar convenios para que algunas instituciones, como el Ayuntamiento de Zaragoza, use el servicio de taxi en los desplazamientos de los funcionarios cuando sus tareas lo requieran, permitiendo así reducir el número de vehículos municipales.