Es una batalla que lleva su nombre, la de los grupos sindicales de Zaragoza. El PSOE volvió a urgir ayer al equipo de Gobierno de Azcón a que actúe, invierta y resuelva un problema que, por otro lado, es histórico, como es la suciedad y el abandono de los patios comunes de estas viviendas.

Uno de los motivos tiene que ver con la titularidad de esos suelos, ya que no todos son propiedad del ayuntamiento, sino de la DGA y distintas cooperativas. Esto se traduce en que el consistorio solo tiene obligación de mantener y limpiar aquellas que son de su titularidad.

«Árboles sin podar, abandono y deterioro de las plazas, vecinos que no tienen ascensores y que están atrapados en sus viviendas. Esto está pasando en la ciudad de Zaragoza en el siglo XXI», declaró la portavoz del PSOE, Lola Ranera, en una de las plazas del grupo de Balsas Ebro Viejo.

Según Ranera, para el equipo que dirige Jorge Azcón se tratan de «vecinos de segunda» a los que «les da la espalda».

Los socialistas presentarán una moción en el próximo pleno para que se «solucione ya la situación jurídica» de estos grupos. Lo cierto es que este tema ya se trató en la bilateral que se celebró antes de la pandemia y, según explicaron ayer desde Urbanismo, el proceso para alcanzar un acuerdo para la cesión demanial va por el buen camino.

En Zaragoza existen 21 grupos sindicales, con 658 edificios y 8.560 viviendas, de los que cinco son propiedad del consistorio. Se trata de las plazas de los grupos Balsas Ebro Viejo 1 y 2 y Teniente Polanco en el Picarral, Ortíz de Zarate en el Arrabal y Mistral en el barrio Oliver. El resto o bien son del Gobierno de Aragón que, en tería, debería ceder su titularidad, o de antiguas cooperativas. En teoría, se tiene que formaliza la cesión por parte de la DGA del grupo Girón (Las Fuentes), San Jorge y Arzobispo Domenech (La Bombarda).