El proceso ha sido lento, tortuoso y enconado, pero finalmente ha llegado el acuerdo. El PSOE y Podemos presentaron ayer de forma oficial el documento que la pasada semana consensuaron para que la formación morada garantice su apoyo en el trámite parlamentario a unas cuentas en las que figura un aumento de 250 millones en gasto social.

La expresión usada por ambos partidos fue la de «por fin». En todo caso, las discrepancias entre las dos formaciones siguen en el aire. La decisión de no considerar fundamental las dimisión del consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, no impidió que el líder de Podemos en Aragón, Pablo Echenique, aseguró que seguirán trabajando «para que se produzca el cese de una figura que se ha revelado como un intocable de la política aragonesa».

Y señaló a su vez que aunque hayan cambiado el sentido de su voto «por responsabilidad», como decidieron el lunes tras un intenso consejo ciudadano que se alargó hasta casi las once de la noche, no consideran propia la ley de cuentas que contribuirán a sacar adelante. «Este acuerdo es el máximo al que el PSOE está dispuesto a llegar: nosotros hubiéramos ido mucho más lejos», explicó.

También señaló que en adelante no se harán responsables de su desarrollo. «El presupuesto no será nuestro», insistió. Por su parte, el portavoz socialista, Javier Sada, tiró de refranero, «nunca es tarde si la dicha es buena», para manifestar su satisfacción por el acuerdo logrado tras una semana de «constantes negociaciones, interlocución intensa y cruces de documentos» que pone fin a cinco meses de diferencias que parecían prácticamente insalvables.

Sada restó importancia a las diferencias de criterio enunciadas por Podemos al señalar que desde la primera redacción del borrador ya se habían tenido en cuenta los puntos de vista de los cuatro partidos que apoyaron la investidura. Y sobre la última condición que frenará varias vías de educación concertada recordó que el PSOE desde el comienzo de la legislatura ha estado «apostando por la escuela pública».

El documento suscrito por las dos formaciones permitirá iniciar la fase de enmiendas, que se espera rápida para poder votar en las Cortes de Aragón antes de dos meses las cuentas de este año. «Si no hay grandes sorpresas en la tramitación todo debería ser bastante eficiente», indicó Echenique. Una vez difundido el acuerdo, el PSOE anunció que se pondrá en contacto con Izquierda Unida y con CHA para trasladar las conclusiones principales del documento y «acercar posiciones», según indicó Sada