El grupo del PSOE, PP y Ciudadanos en el Ayuntamiento de Zaragoza han sacado hoy su propia propuesta para impulsar un "outlet" en los terrenos de las antiguas oficinas de Pikolin a cambio de compensaciones como la cesión de terrenos colindantes para el proyecto de huertos municipales.

Con este acuerdo, que se someterá a votación en el pleno del próximo lunes, ha decaído la propuesta del equipo de Gobierno de Zaragoza en Común que pretendía mantener la calificación de los terrenos como zona H (industrial) de la que quedaran excluidos los usos comerciales o que al menos los promotores cedieran el 10 por ciento del aprovechamiento del suelo, la construcción de pantallas antirruido y la dotación de sistema de transporte privado.

Medidas que se han debatido en la comisión de pleno de la Gerencia de Urbanismo y que han contado en ambos casos con la abstención del grupo de CHA.

El lunes se someterá a votación, una vez informada por los servicios jurídicos, la propuesta alternativa presentada por el PSOE y suscrita por PP y C's por la que se admitirán los usos comerciales solicitados por los promotores y se les exime de la cesión del 10 % del aprovechamiento del área de acuerdo con la norma que existe para este tipo de áreas.

Además, deberán ceder 6,5 hectáreas de los terrenos colindantes para su incorporación a los programas medioambientales del ayuntamiento, implantar un sistema de transporte colectivo privado y adoptar las medidas correctoras que recomienda la Agencia de Medio Ambiente y Sostenibilidad.

El consejero municipal de Urbanismo, Pablo Muñoz, ha lamentado que se haya dado "luz verde de facto a un proyecto que va a acabar ahogando" a los comercios y a los barrios y con la que se plasma "una santa alianza" del "pregobierno" que se está fraguando a nivel estatal así como con las "grandes fortunas y grandes promotores".

A su juicio, si se han planteado compensaciones es "porque hay un mal" y hacerlo a cambio de "unos huertos" además de que "no es de recibo" es "reírse de la ciudad".

"No al 'outlet' ni a las excusas baratas para intentar explicar una posición que no entiende nadie", ha subrayado Muñoz, para quien "esta alianza que denota que no han entendido nada de este colapso urbanístico ni del modelo de la ciudad".

Desde el PP, el concejal Pedro Navarro ha recordado que su grupo llevaba "año y medio pidiendo que nos dejasen votar sobre un proyecto de muchos millones de euros de inversión y miles de puestos de trabajo que no tiene informes negativos y que cumple con todas las normas".

Navarro ha calificado de "lamentable" la actitud de Muñoz, "presionando" al secretario general para que no dejase votar la propuesta presentada por el PSOE y ha instado al equipo de gobierno a que se haga lo que "dicen" los informes, lo que recoge el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y "toda la legislación".

La edil socialista Lola Ranera ha calificado de "absurdo" que el equipo de gobierno presente una propuesta contraria a la que presentan los promotores y a la que aprobó de forma inicial "cuando era IU".

Para Ranera, tampoco tienen sentido que Muñoz defienda un 'outlet' en el centro de la ciudad y en cambio no lo permita en las afueras.

Según el concejal de Ciudadanos Alberto Casañal, este acuerdo con PP y PSOE es el "resultado de la falta de negociaciones con el resto de portavoces" por parte del gobierno municipal y le ha pedido a Muñoz que "sea muy clarito, se acoja a la realidad y diga qué riesgos hay" para oponerse a este complejo.

Por su parte, el portavoz de CHA, Carmelo Asensio, ha mostrado su "escepticismo" ante la "surrealista" Comisión de Urbanismo de hoy en la que una de las propuestas era "diferente a la original" y la otra "la excavadora" que han formado PSOE, PP y C's de volver con todos los usos.

Asensio ha asegurado no entender la "poca seriedad" y el "poco rigor" que se ha mostrado en este proyecto en el que ha echado en falta "informes serios" sobre los impactos, tanto positivos como negativos del 'outlet', así como que se haya intentado, por parte de Muñoz, "utilizar a los servicios municipales para estudios poco consistentes".

Por su parte, Podemos Zaragoza ha emitido un comunicado en el que "lamenta y condena" que el "tridente del Régimen" se haya posicionado en contra de los intereses de la ciudad de Zaragoza y "a favor exclusivamente de una de las grandes familias de la ciudad -en este caso la familia Soláns-".

Asimismo. ha reprochado a PSOE, PP y C's haber "desoído sistemáticamente" la voz de comerciantes y autónomos en contra de este "mega-centro comercial" y demostrar "a quién sirven realmente", al tiempo que ha calificado de "bochornoso" como Ciudadanos "a la primera ocasión que tiene", traiciona a los colectivos que había defendido en su campaña electoral.