El municipio de La Fresneda (Teruel) exhibe en la Casa de la Encomienda de la localidad así como en la propia web del consistorio un cartel informativo que se refiere al rey Alfonso II el Casto de Aragón como primero de Cataluña, según denunció ayer la Plataforma Aragonesa No Hablamos Catalán.

Esta plataforma destaca que vecinos de este municipio, gobernado en las dos anteriores legislaturas por PAR y PSOE, han expresado su malestar por la leyenda incluida en dicho cartel ya que, indican, los textos históricos se refieren a Alfonso II como rey de Aragón y conde de Barcelona.

La asociación confía en que el nuevo equipo de gobierno, liderado por el PP en virtud de un acuerdo con el PSOE, corrija tanto el panel informativo como la web municipal.

Según el portavoz de esta plataforma, Carlos Acorella, «ya no nos sorprenden en absoluto las manipulaciones históricas y lingüísticas que el nacionalismo catalán inventa». «Lo alarmante es que se den ya en el propio Aragón y, en casos como en La Fresneda, en pueblos gobernador por el PAR», agregó.

A juicio de Acorella, «el pacto para el Gobierno autonómico entre PSOE y PAR cuesta de entender porque el Gobierno de Javier Lambán se ha dedicado en los últimos cuatro años a imponer el catalán todo lo posible en Aragón, con la colaboración y presión de CHA y Podemos».

Los cambios históricos sobre el reino de Aragón revisten varias formas. El pasado año, por ejemplo, un libro de texto en catalán de uso común en Baleares recogía que al casarse Petronila de Aragón con Ramón Berenguer IV se incorporó la Casa de Barcelona al reino de Aragón.

Asimismo, señalaba que el condado de Barcelona pasó a convertirse en reino de Cataluña desde tiempos del conde Wifredo el Velludo, haciendo referencia a reyes catalanes en lugar de aragoneses.

Curiosamente, esos falsos hechos históricos aparecían en un libro de Anaya destinado a la enseñanza de la lengua y la literatura españolas.

Ejemplos como este llevaron al presidente del Partido Aragonés (PAR), Arturo Aliaga, a pedir formalmente a las autoridades catalanas hace ahora dos años que no manipularan la historia de Aragón, un debate que se produce en el marco del enfrentamiento judicial entre ambas comunidades por la posesión de los bienes de Sigena y de las parroquias orientales de Huesca.