Con una amplia presencia de representantes y colectivos de los diferentes municipios e instituciones vinculadas al Camino de Santiago a ambos lados de la frontera, se celebró ayer en el monasterio de San Juan de la Peña una jornada internacional en la materia. La cita sirvió también para presentar la directriz especial elaborada por el departamento de Vertebración del Territorio que pretende regular el trazado a su paso por Aragón y que fue aprobada el pasado diciembre. Gracias al encuentro se pudo avanzar en la coordinación de acciones.

En la apertura de la jornada, el director general de Ordenación del Territorio del Gobierno de Aragón, Joaquín Palacín, explicó que el objetivo del documento es poner en marcha «una herramienta que mejore la situación de los pueblos por los que pasa el Camino de Santiago, potenciar su competitividad económica y la protección de sus recursos». Asimismo, destacó que con la Directriz aprobada «se plantea conseguir una red territorial funcional equilibrada y potenciar la conexión con otros territorios, como Francia; potenciar los paisajes, proteger los espacios del Camino y fomentar la rehabilitación de núcleos urbanos».

MEJORA DE TRAMOS

Palacín también destacó trabajos ya realizados como el acondicionamiento del camino en varios puntos, zonas de descansos, mejora de tramos. Además, las jornadas internacionales que se celebran cada dos años, forman parte de la línea de acción impulsada para reunir a los territorios que comparten el Camino «porque es necesaria la unidad de todas las entidades y asociaciones vinculadas para trabajar conjuntamente».

La conferencia Una oportunidad de reequilibrio territorial: la directriz de ordenación territorial del Camino de Santiago, a cargo de Carmen Andrés y Llanos Masiá, arquitectas del equipo redactor del texto sirvió para abrir el programa de divulgación.

EXPERIENCIAS

Por su parte, el catedrático Rubén González ofreció una ponencia sobre la reinvención contemporánea del trazado. Asimismo, en la cita se expusieron experiencias desarrolladas en Aragón, La Rioja, Navarra, Francia, así como por parte de la Asociación de Municipios del Camino y el Albergue de Artieda.