El aeropuerto de Teruel ha cumplido cinco años y ayer abrió sus puertas a las autoridades y al público al general para mostrar sus instaciones, con el orgullo que da el ser uno de los puntales del desarrollo presente y futuro de la provincia.

El presidente de Aragón, Javier Lambán, que participó en el evento, resumió su historial en pocas palabras al afirmar que la terminal aérea, que empezó siendo una «chatarrería» al acoger aviones al final de su vida útil ha acabo conviertiéndose, en solo un lustro, en un negocio de éxito.

Al acto asistieron miles de personas que, además de contemplar el aterrizaje de dos aviones de combate F-18, pudieron recorrer la plataforma de estacionamiento de aeronaves, donde había F-18, Hércules, helicópteros, naves comerciales, avionetas y una exposición de drones.

El presidente llegó acompañado de los consejeros de Presidencia, de Educación y de Vertebración del Territorio, Vicente Guillén, Mayte Pérez y José Luis Soro, quienes visitaron los diferentes hangares e instalaciones del aeródromo antes de inaugurar una exposición fotográfica.

El proyecto arrancó en el 2004 y, a pesar de que cuando sus impulsores lo pusieron en marcha nadie creía en él, hoy un negocio de éxito, manifestó el jefe del Ejecutivo aragonés, que recordó que todo empezó con una inversión de algo más de 40 millones de euros.

VERSÁTIL // La instalación entró en servicio en el 2013, concebido desde el primer momento como un aeropuerto industrial para el mantenimiento y reciclaje de aeronaves, no para el tráfico de viajeros y mercancías.

Soro, por su parte, subrayó que el potencial del aeropuerto está en su «versatilidad» y el «acierto en su gestión», y en este sentido, agradeció el trabajo del director, Alejandro Ibrahim, y todo su equipo. A su entender, estas dos cuestiones «han permitido que se convierta en un auténtico nodo de investigación, desarrollo e innovación, en colaboración con la Universidad de Zaragoza», y que Teruel esté «en la vanguardia de la I+D+i y la tecnología aeronáutica».

De hecho, el aeropuerto celebra su quinto aniversario con grandes perspectivas de futuro, ya que el Gobierno de Aragón anunció hace meses la inversión de 16 millones de euros en dos años para la construcción de uno de los mayores hangares de Europa y posicionar a Teruel como referente en mantenimiento de aeronaves.