La crisis del Ayuntamiento de Zaragoza, cerrada el pasado miércoles en lo que compete a la cúpula política, amenaza con extenderse al campo de los cuadros técnicos de libre designación. La Ley de Grandes Ciudades, que ha justificado la ampliación de la Junta de Gobierno y el cambio de competencias entre concejales ideado por el alcalde Belloch, supone también un profunda reforma en las sociedades y los patronatos municipales. Las luchas internas entre las familias del grupo municipal socialista --la del propio Belloch y la de Carlos Pérez Anadón, primer teniente de alcalde y fuerza mayoritaria en el PSOE de Zaragoza-- continuarán en la segunda línea de puestos técnicos del consistorio.
Pese al cierre de la reestructuración política municipal, impuesta por el alcalde tras el fracaso de la negociación su número dos, en el ayuntamiento se da por hecho que los cambios y la disputa interna que genera no están cerrados. Fuentes del equipo de Gobierno prevén al menos un periodo de seis meses más para la adaptación completa a la Ley de Grandes Ciudades y al nuevo reglamento municipal.
El documento ha sido elaborado por Carlos Carnicer, presidente del Consejo General de la Abogacía, y el próximo lunes el borrador será examinado por los redactores y los responsables de los servicios jurídicos municipales.
REESTRUCTURACIONES El nuevo espacio legal en el que se mueven los ayuntamientos desde el pasado mes de enero traerá reformas en sociedades clave del consistorio, como son la Sociedad Municipal de Rehabilitación Urbana --a cargo de Ricardo Berdié, recién nombrado teniente de alcalde--, Zaragoza Cultural, Zaragoza Deporte Municipal y la que gestiona el Auditorio.
Habrá reformas también en todos los patronatos del consistorio, entre ellos el que regula las bibliotecas, el de Artes Escénicas --teatros del Mercado y Principal, escuelas municipales de disciplinas artísticas y Ballet de Zaragoza--y el patronato de Turismo.
Algunos cargos tendrán que cambiar de forma obligada porque la ley exige determinadas titulaciones que antes no eran necesarias, y otros lo harán por la reestructuración de los organismos citados.
La aprobación del nuevo reglamento llevará aún algunas semanas, y su aplicación, varios meses. Tras la remodelación del Gobierno y el enfrentamiento abierto entre el alcalde Belloch y Carlos Pérez, las relaciones dentro del grupo socialista municipal están más que tirantes y el periodo de adaptación que se avecinan no ayudará a mejorar las cosas.
Desde Chunta Aragonesista, el socio de Gobierno del PSOE en el ayuntamiento, ya se ha sugerido que las luchas internas deben zanjarse de una vez para no entorpecer la gestión municipal. No puede dedicarse tanto tiempo a aplicación de la Ley de Grandes Ciudades como a la gestión, advierten.
Por el momento, con el alcalde y parte de los ediles de viaje en Brasil, la semana próxima no habrá Junta de Gobierno.
