E l funcionamiento del alumbrado público de la ciudad acumula últimamente varias quejas entre los vecinos de distintos barrios de la ciudad como el Arrabal, Torrero-La Paz, el Actur y Delicias. La mayoría de las protestas se concentran en las zonas verdes que al caer el día ven reducida su visibilidad con la consiguiente intranquilidad que ello genera en los viandantes.
En el Arrabal, los vecinos crítican la oscuridad que reina en varias zonas. Una penumbra que Rafael Tejedor, miembro de la asociación de vecinos Arrabal, achacó a que las luminarias de las farolas quedan ocultas por la excesiva frondosidad de los árboles, que a su juicio deberían haber sido podados, como así está ocurriendo en otras partes de Zaragoza. Además, denuncia que en el parque Tío Jorge hay zonas que carecen de iluminación y eso retrae a los paseantes.
En el sur de Zaragoza, Gregorio Alcaine, miembro de la asociación Venecia-Montes de Torrero, denunció la oscuridad de la zona del Canal a la altura de la calle Valladolid: "Hace dos años robaron los cables de la luz y todavía no se han reparado". El ayuntamiento contestó que, tras el cúmulo de robos acontecidos en esa parte de la ciudad, y dadas las apreturas económicas que sufre el consistorio, se ha procedido a priorizar la reparación de aquellas zonas donde hay viviendas, dejando aparcadas las zonas ajardinadas. Por su parte, en Delicias, Silvia Ortín, de la asociación Manuel Viola, reclamó más luz en el Parque Delicias. Donde ya se ha buscado una solución es en la calle Condes de Aragón (Universidad). A las reiteradas quejas por la ausencia de farolas en la acera de los impares, el consistorio ha respondido instalando en las farolas de la acera de enfrente luminarias supletorias a una altura de seis metros para iluminar por debajo de las copas de los árboles.
