Una quincena de alcaldes participaron ayer en la reunión organizada por el Ayuntamiento de Huesca junto a representantes de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), la diputación provincial (DPH) y la directora general del Instituto Aragonés del Agua (IAA), Inés Torralba, para analizar de forma conjunta la situación de captación y traída de aguas. Un encuentro del que salió la decisión de constituirse en grupo de trabajo, y en el futuro un consorcio, para conocer los recursos hídricos disponibles, las necesidades de abastecimiento, y las infraestructuras con las que se cuenta en la provincia.

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, hizo especial hincapié en la necesidad de ordenar la gestión del agua de boca, ya que, en el caso de Huesca, su sistema de captación e infraestructuras dan servicio a la capital altoaragonesa y a otros 20 municipios, mancomunidades y algún consorcio de aguas. Y es su consistorio quien asume todas las obras de mantenimiento, reparación o ampliación de la red. La coordinación del grupo de trabajo correrá a cargo de la edila oscense de Servicios Generales, María Rodrigo.