Rafa Marrón es médico de Urgencias del Hospital Miguel Servet de Zaragoza desde hace más de 20 años, pero desde que tiene uso de razón ha sostenido un lápiz y un folio para plasmar lo que ve a su alrededor: en estos tiempos, una pandemia de frente, a la que ha puesto cara como "válvula de escape". Ante un panorama "complicado" en cada turno, reconoce en una entrevista a Efe que dibujarla funciona psicológicamente como una especie de catarsis: "Como otros que escuchan música, otros escriben... Yo dibujo". Y así lo ha hecho siempre sobre temas que le rodean o sobre cosas que le gustan, como la medicina o el baloncesto.

Explica que ahora, con la ayuda de las redes sociales, sus bocetos digitalizados "llegan en un momento a miles de personas". "Los que más se viralizan son los de Simón", bromea sobre el popular epidemiólogo. En sus ilustraciones, que se pueden descubrir en la exposición 'Graficovid' que ha rotado por diferentes emplazamientos zaragozanos, muestra otras caras conocidas como las de Luke Skywalker, Spider-Man, Obélix o Mortadelo.

Todos ellos luchan contra "el bicho", como denomina al coronavirus en muchas de sus viñetas en las que, acompañando a estos personajes de ficción, siempre se asoman otros anónimos, de carne y hueso, que la narrativa gráfica ha "elevado a héroes" en algunos momentos de la pandemia: los sanitarios y el personal esencial.

Tomando como referencia algunas de sus viñetas, pero sobre todo el trabajo de ilustradores (sanitarios y profesionales) del ámbito nacional e internacional, Marrón analizará este martes la narrativa gráfica durante la pandemia. Lo hará en una charla que cerrará las Jornadas de Calidad Asistencial de Aragón, que reúnen a más de mil personas, eso sí, de forma telemática.

Con ejemplos de diferentes autores, muestra cómo en la narrativa gráfica se ha hecho referencia a temas comunes como la vida en los balcones y el confinamiento, la labor de los trabajadores esenciales, los mayores y las residencias, el esfuerzo de los sanitarios o la añoranza de sus familiares.

El lenguaje bélico también ha impregnado estos dibujos con sanitarios saliendo de las trincheras, luchando con escudos o disparando con vacunas. "Se ha hecho mucho el símil de una guerra, aunque esto realmente no es una guerra", señala el viñetista, quien también ha realizado un dibujo basado en uno de los fotogramas de la película 'Senderos de Gloria', de Stanley Kubrick.

Pero si hay un protagonista en este tebeo de pesadilla es el coronavirus. ¿Cómo representarlo? Los sanitarios dibujantes han tratado de estudiar su estructura para mantener rasgos característicos como la famosa proteína S. "Es muy pequeño y prácticamente no tiene color, pero en el humor gráfico la gran mayoría lo ha pintado de color verde. Será porque el verde se asocia con algo venenoso, radiactivo", argumenta Marrón, quien invita a imaginarse al coronavirus: probablemente, se nos represente de color verde.

Como evidencia, el microscopio electrónico permite ver al "enemigo", algo que diferencia desde el punto de vista iconográfico a otras pandemias, como la peste negra, la viruela o la gripe española. A modo de reflexión, el viñetista considera que se ha pintado mucho al coronavirus, pero poco a lo que ha acontecido dentro de los centros sanitarios, consecuencias que plasmaban mucho más los pintores de pandemias de otras épocas.

En la charla, el médico compartirá los dibujos de sus colegas de toda España, como Augusto Saldaña, Violeta Ferrer, Tolo Villalonga, Fernando Richar, 'Yo, Doctor' o Mónica Lalanda, fundadora del grupo Medicina Gráfica -del que forma parte Marrón- y que consiguió que uno de sus dibujos sobre cómo los sanitarios se enfrentaban al virus con pocos medios tuviera una mención en la prestigiosa revista inglesa 'The Lancet'.

Otros ejemplos

Dibujantes e ilustradores del ámbito sanitario que "tienen un plus porque reflejan de primera mano lo que se ha vivido", comenta, y que han plasmado la situación con humor, ironía o ternura, pero también con imágenes cuyo significado pone la piel de gallina. Un ejemplo es el de Víctor Rodríguez, trabajador del Hospital de Fuenlabrada (Madrid), que pintó un sendero en el que aparecen emparejados los zuecos de los compañeros que perdieron por el camino.

En el análisis también se plasma el trabajo de dibujantes y pintores españoles como Miki Duarte, José Antonio Bernal, Sara Jotabé, Juan Lucena, Juan Carlos Contreras, Idígoras y Pachi, Nacho Velmar, Sento o Jorge Arranz.

A nivel internacional ha seleccionado, entre otras, imágenes del iraní Alireza Pakdel, del italiano Milo Manara, del misterioso artista urbano Banksy o del brasileño M.J. Hiblen, dibujante de cómic fantástico, y que es uno de sus favoritos. El objetivo de este médico que siempre anda con una libreta en la mano es mostrar la pandemia a través de los ojos de estos artistas, pero también que se les ponga cara a ellos, que siguen dibujando para nosotros, ahora, nuevas escenas relacionadas con la vacuna, las cepas o la falta de responsabilidad.