La mejora de la situación epidemiólogica en Aragón en relación a meses anteriores ha llevado a que los centros de salud, en función de su carga de trabajo y su autonomía, hayan podido modificar sus equipos de rastreo. Estos, en gran parte, están configurados por personal de enfermería que ha compaginado su labor con las llamadas a los contactos estrechos de positivos.

En centros como Parque Roma siguen todos, mientras que en otros como Las Fuentes Norte hay una persona menos dada la caída de casos. «Aquí se rastrea todo lo que se debe y se hacen todas pruebas que sean necesarias», señaló el personal. La tarea sigue, pero algunos expertos como el epidemiólogo aragonés Nacho de Blas considera que «se está haciendo poco rastreo» si se tiene en cuenta la cifra de casos diaria (que ha ido subiendo progresivamente), así como el alto número de pruebas de antígenos, «que son menos eficaces y quizás se estén escapando ahí algunos falsos negativos».

La situación la confirman algunos pacientes que, afines a un contagio, han sido llamados tarde. «Que se tarda en localizar contactos es cierto. Sé de un positivo al que tardaron una semana en notificar a sus contactos directos que se aislaran», indicó ayer un profesional sanitario a este diario.

En Sanidad no disponen de un número concreto de cuántos rastreadores hay ahora en Aragón (cada centro se organiza), pero, ante esa impresión de que se puedan estar escapando algunos casos, este martes se notificó un cambio en la estrategia por parte de la consejería. Según explicó el director general de Salud Pública de la DGA, Francisco Javier Falo, a partir de ahora se someterá a dos PCR a aquellos contactos estrechos de personas contagiadas de covid que hayan dado negativo en una primera prueba diagnóstica. «El objetivo es mejorar el grado de fidelización al aislamiento de los contactos como mejor manera de cortar la transmisión», dijo.

Es decir, Sanidad quiere amarrar, de alguna manera, el cumplimiento de las cuarentenas. La medida ya se ha comunicado a los centros de salud y la forma de proceder será realizar una segunda PCR a ese contacto próximo a partir del quinto o sexto día de la primera. «Esto sirve para marcar otro escenario temporal de obligación para permanecer en casa», señaló Falo.

En estos momentos, Aragón realiza un seguimiento a 4.474 personas que tienen relación directa con un contagiado. Es la misma cifra que se manejaba en diciembre, antes del estallido de la cuarta ola. El pico de seguimiento se produjo en la tercera onda de Aragón, en noviembre, cuando se llegó a contactar con 24.297 ciudadanos.

Ahora mismo, por cada caso de covid en Aragón se rastrea a 2,6 contactos y, de los identificados, el 22% se convierten finalmente en contagio de covid, según fuentes de Sanidad. La trazabilidad de los casos, es decir, la capacidad de saber dónde se ha contagiado cada persona, es del 60%