El inicio de las rebajas ha pasado a ser un día más simbólico que real. El comienzo oficial fue ayer, tradicionalmente establecido tras las fiestas de Navidad, pero lo cierto es que en las calles y en las tiendas de Zaragoza la percepción ya no es la que era. «Ya no hay filas ni tampoco esas carreras a la hora de levantar la persiana para conseguir la mejor ganga», apuntaba ayer Yolanda García, que se acercó hasta la comercial calle Delicias con su hija Laura para ver si compraba algo. «Después nos iremos al centro, pero preferimos estar en el barrio porque hay menos gente», añadió la joven, que ya ha comprado en las últimas semanas «algunos chollos» por internet.

«Vamos de rebajas porque es algo como muy nuestro, de familia y amigas, de pasar el día por ahí, pero lo cierto es que a veces gastas sin necesidad, porque ya has comprado antes», señala.

Así, el adelanto de los descuentos en muchos comercios desde hace semanas, la presencia de ofertas asequibles antes de Reyes, la celebración del Black Friday o la venta por internet han desvirtuado el inicio de la campaña de rebajas, que ha perdido fuelle y es algo perceptible por los propios dependientes.

CAZADORAS Y BOTAS

«Hemos abierto a las 9.30 horas, pero la verdad es que todo está muy tranquilo. También hace mucho frío y eso no anima a la gente a madrugar», decía Eugenia Moreno, encargada de la tienda de moda infantil Kiddy’s Class, en la calle Delicias, y que pertenece al grupo Inditex. Con descuentos de hasta el 50%, el producto más demandado en este comercio son las cazadoras y Moreno reconoce que «el porcentaje de rebaja» es más alto que otros años en los productos. «Se debe a que la campaña no ha sido buena, no ha hecho mucho frío y ahora tenemos ese producto que hay que sacar adelante. También en calzado se nota», dice.

Sí que reconoce que el Black Friday fue un «un buen día, hubo muchas ventas», pero Moreno señala que esto se trata de «pan para hoy y hambre para mañana», dice. «Es un boom y hay ventas, pero al pequeño comercio, al de barrio, las grandes superficies nos hace mucho daño con grandes publicidades y ofertas», añade.

SIN PRESUPUESTO CLARO

Muchas tiendas, de hecho, permanecían ayer cerradas pese a ser festivo laborable. Otras ampliaron su horario y algunas no cerraron al mediodía. Hasta las grandes superficies como GranCasa, Puerto Venecia o el Corte Inglés se acercó mucha gente, pero no todas las visitas se tradujeron en compras debido, principalmente, a que son espacios donde los descuentos ya llevan varias semanas.En el outlet Carlos Reula se vende estos días calzado con descuentos de hasta un 70%. «La gente está animada, aunque nosotros ya empezamos con los descuentos el 26 de diciembre», explica Beatriz Labrador, dependienta. «El cliente busca mucho la bota o el botín, es algo que ya lleva en la cabeza, y va a algo seguro», añade.

En otras tiendas de Inditex como Pull & Bear o Stradivarius también se podían ver ayer en sus grandes cristaleras anuncios de rebajas y mucha gente en su interior, pero lejos de esas escenas de hace años. «Yo compro mucho por internet. Vengo a la tienda, veo el producto, me lo pruebo y cuando hay ofertas on line ya voy a algo seguro», explica Candela Gómez, que acudió a Stradivarius junto a sus amigas.

Tampoco se percibe un presupuesto fijo entre la clientela, aunque todo el mundo busca «el mejor precio» dependiendo del producto y teniendo en cuenta los gastos de Navidad. «La gente no viene con un presupuesto, simplemente lo ve barato y lo compra», cuenta Nerea Núñez, una de las encargadas de la tienda junto a Esther Guallate y Cecilia Yumbla. «Cada año es distinto, pero sí que tenemos más gente que en verano y más ventas que en el Black Friday», añadió Núñez.

Hasta Aragonia, por ejemplo, acudió gente a cambiar algún regalo de Reyes o adquirir productos concretos. «Aprovecho a comprar cosas que durante el año son más caras», reconocía la zaragozana Andrea Barral. «Yo estoy en contra del Black Friday porque destruye a la pequeña empresa y, además, muchas veces los descuentos no son tantos. Sí que uso mucho internet cuando hay ofertas», señala Marta Lahoz.