Los sindicatos de médicos y enfermería han comenzado este jueves los paros parciales de diez minutos convocados para denunciar la "situación límite" de la sanidad aragonesa, y que se reproducirán el día 21 de este mes de febrero, a las 12.00 y a las 18.00 horas. Los sindicatos aspiran a que estas protestas sirvan de sondeo para una posible huelga indefinida a partir del mes de abril en el caso de que el Gobierno de Aragón no se avenga a negociar sus reivindicaciones laborales. Según el Gobierno, que para evaluar el impacto del llamamiento ha tenido en cuenta el global de los trabajadores del SALUD, la participación en el llamamiento ha sido del 3,21%. Por provincias, el porcentaje de participación en el paro ha sido del 2,5% en Zaragoza, 5% en Huesca y 4,6% en Teruel. Sin embargo, CEMSA Aragón estima que la participación ha sido del 70% teniendo en cuenta que implicaba a médicos de Atención Primaria y a enfermeros.

Las movilizaciones coinciden con las que se llevarán a cabo en otras comunidades y en todo el Estado.

En declaraciones a los medios con motivo de este primer paro, el presidente del Sindicato Médico Atención Primaria y Atención Sanitaria, Leandro Catalán, ha explicado que las principales reivindicaciones se centran en buscar un punto de encuentro en un acuerdo profesional con el Gobierno de Aragón en el que se recojan medidas de "dignidad y calidad de trabajo".

Además, Catalán también ha incidido en que el colectivo pide "mejoras y cambios" en los recortes retributivos y laborales que se produjeron en 2010 como una disminución de la sobrecarga asistencial, del cambio de horas de guardia o de una jornada de 35 horas para el colectivo.

Por ello, la secretaria general del CEMSA Aragón, Mercedes Ortín, ha subrayado que médicos y enfermeros aragoneses "no están contentos" de cómo se está llevando a cabo el diálogo desde el Gobierno de Aragón y de la situación en la que se encuentran.

En Aragón, el colectivo sanitario se sitúa en 1.500 médicos de Atención Primaria, 3.500 sanitarios de hospitales y 5.000 pertenecientes a personal de enfermería, según ha cifrado Catalán.

Ortín ha explicado que la situación viene de lejos puesto que el último acuerdo que tenía un contenido retributivo económico y de condiciones laborales se firmó en 2007, y por ello, subraya que se ha quedado "obsoleto", provocando que Aragón se sitúe a la cola de todas las Comunidades Autónomas en cuanto a conceptos "retributivos, asistenciales y profesionales".

Por su parte, Catalán ha hecho un llamamiento al presidente de Aragón, Javier Lambán, quien, ha asegurado, tiene "encima de la mesa", desde mayo del año pasado, la situación de incomodidad en la que se encuentra el colectivo y a la que todavía no han obtenido respuesta.

Asimismo, la secretaria general del sindicato de enfermería SATSE en Aragón, Pilar Navaz, ha incidido en que el colectivo de enfermería también "sufre un problema muy serio" ya que son "muy pocos" y no son capaces de llegar a todos los pacientes.

Navaz ha explicado que la media del colectivo está "muy por debajo de la europea" ya que ronda el 5,3 enfermeros por cada mil pacientes, mientras que en Europa se encuentra en 8,8.

Estas son algunas de las reivindicaciones principales.

1 Niveles de carrera profesional

Los profesional reclaman eliminar el nivel 0 de la carrera profesional. Este obliga a los profesionales a estar cinco años en el puesto de trabajo como propietario para poder solicitar el nivel 1 y supone, según los sindicatos, una pérdida económica de 3.000 euros al año. Eso no ocurre en otras comunidades. La carrera profesional es un complemento ligado a la antigüedad y a la promoción profesional. Es un reconocimiento a su desarrollo profesional en cuanto a conocimientos, experiencia en las tareas asistenciales, investigación y cumplimiento de los objetivos de la organización en la cual prestan sus servicios. Los colectivos denuncian que los niveles de carrera (hay hasta 5) nunca han llegado a completarse y el 4 está suprimido. No hay opción de acceder a él por falta presupuestaria y recorte.

2 Recortes en las pagas extra

Los sanitarios aragoneses denuncian que en el 2010 sufrieron un recorte de más del 40% en sus pagas extra con motivo de la crisis. Esa perdida de poder adquisitivo también se detectó en el salario base, que fue reducido. Médicos y enfermeros piden recuperar sus sueldos de antes de la crisis. Aseguran que los acuerdos pactados por el Ministerio de Hacienda son «insuficientes».

3 El pago de la Atención Continuada

Cemsatse también reclama un mejor precio de la hora de Atención Continuada, el servicio que se ofrece en los centros de salud cuando finaliza el horario ordinario. Según el sindicato, Aragón es la segunda que menos cobra en España después de Andalucía. Además, explican que los niveles de Atención Continuada no se actualizan desde el 2007. En este sentido, el personal médico y de enfermería de los puntos de Atención Continuada han protestado varias veces ante el Salud para reclamar su incorporación a los equipos de Atención Primaria «en igualdad de derechos y condiciones». Aseguran que se dan casos de jornadas de trabajo que sobrepasan ampliamente las horas establecidas para estos profesionales, mientras que otros no llegan. Piden equilibrio.

4 Agendas cerradas y carga burocrática

Otro de los problemas que adolecen algunos centros de salud son el alto número de tarjetas sanitarias asignadas por médico. El personal pide al Salud que establezca agendas cerradas y limitadas a una cifra para no saturar las jornadas de trabajo y poder ofrecer una atención sanitaria de calidad al paciente. En este sentido, denuncian que la cantidad de personas que deben atender genera esperas y retrasos en las salas de espera. Respecto a este tema, el Salud ya se comprometió a fijar en este 2019 una cantidad límite de 1.600 tarjetas sanitarias en los centros de salud más masificados de Zaragoza y se han hecho contrataciones. El problema en las consulta de los médicos y de las enfermeras de Aragón se agrava con la carga burocrática que tienen que soportar debido al nefasto funcionamiento de los programas informáticos. En muchos rincones de la comunidad la conexión no es buena, eso conlleva paros y retrasos que, en algunos casos, obliga a realizar trámites a mano.

5 Temporalidad y falta de médicos

Que en Aragón faltan médicos es sabido por todos. El personal reclama reducir la temporalidad y los contratos eventuales, así como fomentar las plazas fijas y unas plantillas estables. La carencia de especialistas, sobre todo en zonas como Teruel, Alcañiz, Jaca o Barbastro, es evidente. La falta de estabilidad laboral la paga el paciente.

6 La ‘broma’ de las jubilaciones forzosas

El Salud, pendiente todavía de una aprobación de presupuestos, no puede asumir actualmente un incremento de sueldos o retribuciones. A ello se suma que el Departamento de Sanidad está asumiendo el pago de unos 33 millones de euros como retribución de las jubilaciones forzosas a los médicos aragoneses que han presentado recurso contra la medida. Se trata de una herencia del PP de Rudi, que en julio del 2013 impuso la jubilación forzosa a los 65 años y no permitió la prórroga de su vida laboral. Hace unos meses, el Tribunal Supremo declaró nulas varias de las jubilaciones impuestas en Aragón. Ante este agujero, el Salud todavía dispone de menos liquidez.