El sector agrícola y ganadero puso de manifiesto ayer su preocupación ante diferentes situaciones que de aquí a unas semanas les podían causar grandes daños. Entre ellas se encuentra la campaña de recolección de frutas donde más de 15.000 trabajadores, provenientes de diferentes partes del mundo, se juntan para sacar con éxito la producción frutícola. Así lo dio a conocer ayer el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Aragón (UPA), José Manuel Roche, que manifestó las dudas de los agricultores ya que no sabían cuales iban a ser «las condiciones para alojar a los temporeros» ni cómo se iban a poder mover «para venir a trabajar a Aragón».

Ante esta situación Roche explicó que quieren ser «previsores» y no tener que «buscar soluciones cuando el problema ya esté encima». Dentro de unos 20 días se comenzarán a recoger las primeras frutas, las cerezas en concreto, para continuar con el resto de frutas de hueso y terminar con la manzana y la pera. «Lo que queremos es ir con garantías de que no tendremos problemas», explicó Roche, que, a pesar de eso, es consciente de que van a tener restricciones debido a las medidas que ya se están tomando estos días a nivel nacional.

Medidas preventivas

Desde UPA aseguran que «ante todo está la salud de las personas» y por ese motivo los trabajadores tomarían «todas las medidas necesarias» para garantizar una buena recolecta. «Se trata de no arruinar al agricultor y, sobre todo, de sacar toda esa fruta al mercado en un momento en el que hace mucha falta y para ello es necesario mano de obra y ser más permisivos en estas situaciones excepcionales».

Por el momento, Roche aseguró que desde el Gobierno de Aragón y las diferentes administraciones les están poniendo «todas las facilidades posibles» para que todos ellos puedan seguir desarrollando su trabajo. «Nos aseguran que los camiones de pienso y de animales puedan seguir circulando con normalidad, así como los trabajadores, que cada día tienen que desplazarse para seguir cuidando sus animales y sus campos».

El cierre de la hostelería, así como de los comedores de colegios y residencias, ha afectado duramente también al sector ganadero debido a la gran estrecha relación que les une de normal y que ahora, han visto como los pedidos han sido cancelados de un día para otro ante la confinación de los ciudadanos. Desde UPA comunicaron que los daños ya se estaban dejando sentir, «sobre todo en los sectores del ovino-caprino y del porcino» debido a que son productos que van principalmente destinados a la restauración y que no se suelen consumir en los hogares. «En Aragón producimos ternasco y cerdos grandes para engordar para salas de despieces, son cosas que no se consumen ahora porque ante una situación de alarma, la gente prioriza unos productos antes que otros».

En cuanto a las exportaciones, Roche confía en que «no se cierren puertas y que se siga garantizando la alimentación de los ciudadanos de cada país». Además, hizo hincapié en que España es «puramente exportador de muchos alimentos que solo se pueden producir en zonas del mediterráneo». A pesar de esto, Roche explicó cómo no se puede bajar la guardia y que «sin ser alarmistas» tienen que estar «muy preparados ante lo que pueda ocurrir, debido a que es probable que se prioricen unos alimentos y otros no y tendremos que estar preparados».

Bajos precios

Además, desde el sector agrícola aseguran que han «dejado de lado las reivindicaciones» que se estaban produciendo en los últimos meses respecto al precio de los productos. Roche explicó que van a cumplir con su «compromiso de seguir produciendo alimentos para poder meterlos en la cadena alimentaría y evitar de esta manera el desabastecimiento» que teme la sociedad, sin tener en cuenta la situación que hace unas semanas llevaba a miles de agricultores y ganaderos a tomar las calles de la capital aragonesa.Ahora, este sector pide al Gobierno de España que tenga en cuenta en el paquete de ayudas a todos aquellos que se están viendo afectados por esta situación de una manera o de otra.

Ante esta situación, UPA Aragón aprovechó también para volver a lanzar un llamamiento a todos los consumidores, «para que piensen que con sus decisiones de compra contribuyen al mantenimiento de sectores enteros, de puestos de trabajo y de zonas rurales».

La huida al medio rural con la llegada del covid-19 recibe muchas críticas

Cuando el Gobierno de España decretó el Estado de Alarma y exigió a sus ciudadanos que se mantuvieran durante mínimo 15 días en sus casas, fueron muchos los que decidieron trasladarse de las grandes ciudades a las zonas rurales. Este acto fue muy criticado por todos aquellos que de normal residen ahí y desde UPA también manifestaron su opinión ante este acto que consideraron como «irresponsable». El secretario general, José Manuel Roché, aseguró que no vio «con buenos ojos la huida al medio rural» debido a que se recomendaba que no hubiera desplazamientos. Ante esta situación, Roche explicó que en los pueblos «hay muchas personas mayores que estos días no están saliendo de sus casas» y que no se podía pretender que las personas que han ido «lo hagan con la intención de poder salir a la calle». «Tenemos que aplicar el sentido común», zanjó.