La sala de la Corona del Edificio Pignatelli se convirtió ayer en un plató televisivo para celebrar el Día de la Educación Aragonesa, un acto dedicado a visualizar la excelencia de los alumnos y el compromiso de los docentes y las familias, así como de toda la comunidad educativa. «Los verdaderos protagonistas son los alumnos. La educación es un relato que se escribe entre todos y el Gobierno de Aragón quiere reconocer la magnífica labor de aquellas personas y entidades que contribuyen a mejorar la calidad de la enseñanza», dijo la consejera de Educación, Mayte Pérez.

La DGA distinguió durante el acto la labor del Consejo Escolar de Aragón, la Agrupación Turolense de Asociaciones de Personas con Discapacidad Intelectual (Atadi), el programa Leer Juntos, del colegio Santos Samper de Almudévar y el centro educativo para adultos Miguel Hernández de Huesca. La presidenta del Consejo Escolar, Carmen Martínez, se mostró orgullosa del galardón «porque supone un reconocimiento a la labor educativa que lleva desarrollando desde su creación hace veinte años», dijo.

Asimismo, Martínez recalcó la implicación por mejorar la educación del consejo, «el único órgano donde están todos los sectores (padres, alumnos y profesores), lo que permite conocer los diferentes puntos de vista de un mismo hecho educativo», dijo.

Además, los docentes Manuel Pinos y Pedro Vivancos recogieron una mención honorífica a su trabajo. Pinos señaló que se trató de «un premio compartido con todos los maestros» y, especialmente, «con aquellos que se esfuerzan en enseñar al alumnado inmigrante», subrayó en su discurso.

El acto de celebración en el Pignatelli también sirvió para premiar a los estudiantes con los mejores expedientes del curso, que recibieron su diploma correspondiente.