El recorte presupuestario en el Ayuntamiento de Zaragoza ha dejado bajo mínimos la operación asfalto que parchea cada verano las vías de tráfico más deterioradas de la ciudad. Este año, el dinero destinado inicialmente a la campaña de reparaciones se recorta un 46% y el número de calles afectadas cae en picado: de las 30 programadas en el 2003 se baja a 13 a en el 2004, una por distrito.

La propuesta para esta menguada operación asfalto se estudiará hoy en el consejo de la Gerencia de Urbanismo; el servicio de Conservación de Infraestructuras ha tenido en cuenta las sugerencias de los distritos, pero en esta ocasión la escasez de dinero ha hecho que sólo se atienda un caso por sector.

El proyecto saldrá a concurso y es posible que el ayuntamiento pueda ahorrar algo más si hay rebajas en las ofertas de las empresas interesadas en ejecutar el plan; el año pasado, la operación asfalto se licitó por 500.000 euros y finalmente se adjudicó por 412.000 euros.

Los trabajos se efectuarán en verano y se desarrollarán durante seis semanas, pero aún no se ha fijado una fecha concreta para realizarlos.

El recorte en dinero de un año para otro se ha notado de forma importante. De los 500.000 euros asignados al proyecto en el 2003 --iban aparte los barrios rurales, que aún tienen pendientes varias obras-- se ha pasado a 270.000 euros.

Las calles que se repararán el próximo verano son las siguientes: Alonso V (Casco Histórico); Camino Las Torres (Centro); Galán Bergua (Delicias); Tomás Bretón (Universidad); Gonzalo de Berceo (San José); Rodrigo Rebolledo (Las Fuentes); avenida Puerta Sancho (Almozara); La Victoria (Oliver); Boyero (Valdefierro); Gabriel Gombaro (Torrero); avenida La Jota (La Jota); Sauce (Santa Isabel) y Sagrada Familia (Casablanca).

Las mejoras en el firme se llevarán a cabo en tramos concretos de estas vías, y en algún caso, como en Gonzalo de Beceo, el parcheo se extenderá por la toda la calle. En total, se repararán 23.220 cuadrados de cazada, a un precio medio de 11.63 euros por metro.

Estos repasos especiales que se contratan cada año se completan con los que realizan las propias brigadas municipales en caso de baches acusados o deterioros puntuales en la red viaria.