La Administración habla de calidad, de socialización. Educación quiere justificar así que 15 municipios se queden sin Secundaria. A partir de septiembre sus alumnos tendrán que desplazarse hasta 36 kilómetros para recibir clases en sus institutos de referencia. Los expertos lo ven de otra manera: la decisión, dicen, de la consejería está motivada por criterios económicos más que pedagógicos. Con menos alumnos en el medio rural se evitan contrataciones de profesorado.
Llevar a los chavales a los institutos tiene sus ventajas, en lo económico. Acumular alumnos en las localidades grandes vacía los colegios de los pequeños municipios y así se evitan contrataciones de profesores. "Quitamos a los chicos de un entorno con una enseñanza casi personalizada a otro con aulas de 30 alumnos. Eso no es dar más calidad en la educación", explica Juan Antonio Planas, presidente nacional de la asociación de psicopedagogos. "Solo se amontonan estudiantes para ahorrar en profesores, esa es la realidad", sentencia.
La medida de la consejería de Educación afectará a 66 alumnos de 1° de ESO y a 58 de 2°. Todos ellos pasarán de recibir clases en su colegio a tener que coger un autobús cada día para ir al instituto. La decisión se ha topado con la oposición de los municipios afectados. Hoy mismo padres, estudiantes y vecinos de Ayerbe se concentrarán frente a su centro de enseñanza para protestar. La titular del departamento insistió ayer, una vez más, en la apuesta que el Gobierno hace por el territorio. "Somos de las pocas comunidades que, cuando hablamos de aulas rurales, hemos puesto un número de alumnos mínimo muy por debajo de lo que exige la propia normativa. Ya no hay comunidades que tengan aulas de Infantil y Primaria con menos de diez alumnos", dijo.
En realidad lo que hace el Gobierno es cumplir con la normativa estatal que impide que alumnos de diferentes etapas educativas estén escolarizados juntos. No es posible, en principio, que estudiantes de Primaria y Secundaria compartan aula con un maestro que imparta clases a todos. Lo suyo sería contratar a un profesor para cada ciclo. Algo que la Administración no va a hacer.
