Menos horas, menos profesores y menos oportunidades educativas. Los recortes en la enseñanza pública vuelven a tener en el medio rural a su principal víctima. En Aragón, numerosos alumnos de pueblos y comarcas verán limitadas sus opciones de realizar actividad física el próximo curso debido a la reducción de 3,5 horas semanales a lo largo de toda la etapa de Primaria que sufrirá la asignatura de Educación Física.

La propuesta de la DGA, con motivo de la implantación de la Lomce, incluye aumentar la carga lectiva de Matemáticas e idiomas, y reducir Lengua, Educación Física y Educación Artística.

La medida, presentada el pasado 10 de marzo por parte de la consejera de Educación, Dolores Serrat, y el director de Ordenación Académica, Marco Rando, establece 12 horas semanales durante los seis años de Primaria frente a las 15,5 actuales.

El requisito afecta a todos los estudiantes, pero especialmente a los alumnos de los pueblos, cuya única actividad física en muchos casos se reduce a la asignatura del colegio. "En Zaragoza o en otra zonas, los niños pueden elegir entre un abanico de actividades para poder realizar ejercicio. Sin embargo, en un pueblo no es así. Si recortan horas de la asignatura, las consecuencias son muy negativas para los chavales, que no realizarán suficiente ejercicio a unas edades en las que es básico. Las consecuencias serán graves en temas de salud", apuntó Eduardo Nuez, coordinador del colectivo +EF en Aragón.

EN DETRIMENTO

La crisis de la enseñanza en el medio rural se agrava. Y cuanto más pequeña sea la comarca, peor. En Teruel, por ejemplo, la zona de Gúdar-Javalambre o la de Albarracín cuentan con muy pocos alumnos y el acceso a la actividad física es complicado. Organizar un partido de fútbol, por ejemplo, se antoja "imposible" debido a la falta de chavales. "Con dos niños, ni siquiera el Servicio Comarcal puede desplazarse a realizar una actividad, así que si encima en el colegio quitan horas, vamos de mal en peor", afirmó Raquel Lucas, coordinadora del servicio comarcal de Deportes en la zona del Jiloca.

"En las zonas rurales hay que centrarse en los chavales y hacer todo lo posible para que su educación esté adecuada a unas formas de vida saludables. Si ahora nos encontramos con problemas, cuando haya menos horas la dificultad se agravará y, probablemente, en muchos sitios se dejen de hacer actividades", apuntó Lucas. En Huesca, sobre todo en los pueblos del Pirineo, y en la provincia de Zaragoza, donde las opciones de la capital "tiran mucho" a la hora de desplazarse a hacer deporte, también temen estos recortes.

Además del problema educativo, en el plano laboral se prevén "dificultades" debido a que la reducción de horas conllevará la contratación de menos profesores de Educación Física. "Si ya estamos teniendo problemas con los docentes en los pueblos, esto es otra punzada para el medio rural", añadió Lucas.

EN SINTONÍA CON EL DOCENTE

En Aragón, los servicios comarcales de Deporte funcionan al margen de los colegios. Sin embargo, existe "una estrecha relación" con los centros escolares de los pueblos que permiten la realización de actividades con los alumnos. "Nuestro objetivo es la promoción de la actividad física y en la mayoría de los casos estamos en contacto con los profesores realizar actividades en los centros", explicó.

De hecho, su "implicación" es "un valor" en alza. "El docente es un apoyo para las comarcas, porque se implica mucho a la hora de trabajar conjuntamente por el bien educativo de los chicos. Una vez más, con esta modificación el medio rural es el más afectado", detalló Lucas.