El proyecto para reformar el albergue municipal de Zaragoza ha sido aprobado por el Gobierno de Zaragoza con un presupuesto de 3.298.727 euros y un plazo de ejecución de las obras de 16 meses. Este permitirá rehabilitar el antiguo cuartel de San Agustín, que será, según explicó la vicealcaldesa y consejera municipal de Derechos Sociales, Luisa Broto, la puerta de acceso al actual edificio. La iniciativa ayudará también a ampliar los espacios de oficinas y de atención social para realizar actividades. «Es un edificio de los años 80 y no es accesible al 100%, dijo Broto.
«El albergue es el buque insignia del plan integral de personas sin hogar que está llevando a cabo Zaragoza. El objetivo es ampliar instalaciones para hacer un nuevo modelo y construir allí un centro de servicios sociales de La Magdalena.
Además de estas actuaciones para dignificar el albergue habrá otras de uso comunitario», añadió Broto.
El proyecto de reforma se ha retrasado porque el área de Derechos Sociales tuvo que modificar el proyecto inicial tras el hallazgo de restos arqueológicos en la zona que modificaron el diseño previsto.
Desfasado / El albergue es un centro de alta capacidad que se ha quedado desfasado en la parte urbanística y de acceso, pero su renovación va más allá de lo urbanístico, ya que buscará mejorar la atención personalizada de las personas.
Desde el ayuntamiento han planteado un nuevo modelo de atención, que esté más centrado en dar capacidad de atención de manera personalizada para hacer procesos individualizados con personas que han perdido prácticamente el contacto con las familias, amigos, la vivienda y además tienen una dificultad a la hora de acceder a un trabajo.
Está previsto que se construya un edificio nuevo, aprovechando la infraestructura existente con espacios diáfanos y amplios donde poder realizar otro tipo de actividades para poder cubrir las necesidades de emergencia actuales.
La reforma de las instalaciones va acompañada de un nuevo protocolo de actuación y de atención a aquellas personas que requieren de los servicios del albergue municipal.
El pasado invierno, el consistorio activó el dispositivo de invierno, cuando, por el frío, aumentan la demanda de camas. El ayuntamiento dispone de 176 en total y, para atender todas las peticiones, tuvo que firmar convenios con varios hostales para poder acoger a estas personas.
