Las obras de rehabilitación y restauración del castillo de Peracense marchan a buen ritmo, una fortaleza que servirá como motor económico, turístico y cultural en Teruel.

En el castillo, Bien de Interés Cultural, se han realizado intervenciones en el exterior, entre las que destacan los trabajos realizados en el poblado de Los Casares.

El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, visitó ayer la fortaleza para ver cómo evoluciona la segunda fase de las obras del Plan Director, que dieron comienzo el pasado 14 de agosto, con una inversión total, con cargo al FITE del 2018, de 450.450 euros.

El consejero indicó que en esta segunda fase se ha actuado tanto en el interior como en el exterior del castillo para «ensalzar el conjunto patrimonial». En el interior del espacio amurallado se ha sustituido el resto de escaleras de madera del recinto, muy deterioradas por el paso del tiempo, y se ha renovado el terreno escalonado de acceso al recinto inferior desde la puerta de acceso al castillo. Asimismo, se han consolidado fábricas deterioradas y completado faltas en los muros de la habitación pentagonal del recinto intermedio y en el muro este del recinto inferior.

En la zona superior se han saneado las humedades que afectaban al salón gótico y la cocina, mediante la impermeabilización de sus cubiertas y se ha procedido a la extracción de sales de los sillares de dichas salas. También se ha recuperado el lavadero usado por la guarnición liberal durante su ocupación de la fortaleza y se han consolidado y rejuntado los sillarejos de los peldaños de la torre de acceso, colocando una pletina.