Los recortes y la aplicación de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) han marcado un año plagado de contestación social hacia la política educativa del ministerio y de la consejería. Tanto a nivel estatal como autonómico, se han prodigado la convocatoria de huelgas de la comunidad educativa. Especialmente exitosa fue la llevada a cabo en octubre del 2013, donde miles de profesores, padres y alumnos aragoneses acudieron a las manifestaciones y vaciaron las aulas.

El rechazo alcanza a varios aspectos englobados en una ley que desde varios sectores se considera "segregadora" y "elitista" y que comenzará a aplicarse ya en septiembre en algunos cursos de Primaria y en la nueva FP básica, que viene a sustituir a los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI).

En este sentido, Educación ha tardado --lo hizo el último día de curso-- en publicar el nuevo currículo aragonés en Primaria y la comunidad educativa viene denunciando "serios problemas" con la puesta en funcionamiento de la Formación Profesional Básica, que, incluso, contaría con la oposición de directores de centros.

Educación también reculó en la realización de las pruebas piloto en 3° y 6° de Primaria, que había previsto para el curso recién concluido pero que aplazó al próximo apelando a falta de instrucciones del ministerio.

Las becas han vuelto a ser protagonistas principales por los "restrictivos" requisitos denunciados por las familias para acceder a ayudas de comedor y material escolar. La medida acaba, eso sí, con la lista de espera. En todo caso, y desoyendo los informes del Consejo de Escolar, Educación ha decidido dar continuidad a este sistema de cara al próximo curso.

COMEDORES Además, la apertura, por primera vez, de comedores escolares en verano tampoco se ha saldado con el éxito esperado. El ministerio destinó 720.000 euros para asistir a niños con escasos recursos y combatir la pobreza infantil, pero la gran mayoría de ese dinero se destinará al Ingreso Aragonés de Inserción (IAI) ya que apenas 1.200 niños se han apuntado --estaban llamados unos 3.000--.

El año también ha venido marcado por la demora en el pago a los centros de los gastos de funcionamiento y la tardía contratación del profesorado interino (apenas un par de días antes del inicio de curso), lo que dificultó la organización de los equipos directivos. También este problema podría repetirse de cara al próximo curso, con la complejidad añadida de la LOMCE.

La ampliación del plan de bilingüismo --modificado y flexibilizado ya que muchos centros no podrían acceder al mismo por la exigencia de profesorado con nivel B2 fijo de plantilla-- se añade a otra serie de rectificaciones del departamento. En algunos casos --muy pocos-- apelando a sugerencias del Consejo Escolar, como anular la medida de permitir a los centros ampliar el calendario escolar. En otras, ante las quejas sindicales, como la supresión de la opción de reducir a una hora y media el periodo entre la jornada matinal y la vespertina. O la supresión del transporte en Secundaria, también rectificada.

En el debate sobre el estado de la comunidad, Rudi anunció la publicación del decreto de educación inclusiva, pero todavía no ha aparecido en el BOA.

Otro de los aspectos polémicos de este año ha sido la convocatoria de oposiciones. Y eso que la consejería había descartado esa opción, repescada a raíz de una sentencia judicial. Su tardía convocatoria, las escasas plazas (210) o problemas con la composición de tribunales marcaron un proceso que también registró un contratiempo durante la celebración de los exámenes, ya que el error de un tribunal en Huesca obligó a repetir la prueba a decenas de aspirantes.

En escolarización, Educación acabó concediendo la tercera vía en el colegio Sáinz de Varanda. No así en Valdespartera, a pesar de ser consciente de la necesidad de un nuevo colegio en el barrio. Sin embargo, el ayuntamiento tumbó un proyecto de construcción de un colegio concertado laico. Las plazas en zonas de expansión siguen siendo una asignatura pendiente, aunque Educación ya ha acometido la ampliación de Rosales del Canal y hará otro colegio en la zona para abastecer también a Arcosur.