La tradicional cuestación de la Hermandad del Refugio el Jueves Santo buscará combatir el descenso en la recaudación del 2017 respecto al año anterior con más mesas petitorias instaladas en diversos puntos de Zaragoza. De esta forma, además de las 55 que se reparten en sendas iglesias de la ciudad, un total de nueve mesas se colocarán en calles y plazas de la capital aragonesa. La entidad, que el año pasado recaudó 150.000 euros, vió como descendían los ingresos en esta campaña en 50.000 si se comparan conlos del año 2016, cuando alcanzó los 200.000 euros. En ese sentido, cabe recordar que en el 2016 la campaña se redujo solo al Jueves Santo después de que el arzobispo de Zaragoza, Vicente Jiménez, denegara que se llevara a cabo la cuestación también el Viernes Santo, como venía siendo habitual.

El hermano mayor de la hermandad, Santiago Sánchez, explicó ayer durante la presentación de la campaña que las mesas estarán en las calles Don Jaime, Alfonso y San Miguel, en el Paseo Independencia, en la avenida César Augusto y en la plaza España, con horario de diez de la mañana a dos de la tarde. Otras tres mesas, instaladas en la plaza Sas y en los paseos Independencia y Echegaray, contarán por primera vez con horario ampliado de diez de la mañana a diez de la noche. En las iglesias, todo aquel que quiera entregar su donativo lo podrá hacer de cuatro a ocho de la tarde.

Respecto al descenso de la recaudación sufrido el año pasado en esta actividad, Sánchez señaló al buen tiempo como causa de que muchas personas decidieran pasar el Jueves Santo fuera de la ciudad.

La cuestación de Semana Santa es una actividad que permite financiar las actividades que realiza a lo largo del año la hermandad, que en el octubre pasado alcanzó su 375 aniversario. Precisamente, los donativos que logran en esta campaña suponen un porcentaje considerable del presupuesto que maneja la entidad.

A lo largo del año lleva a cabo programas como el servicio de Gota de Leche, en el que prestan servicios médicos a bebés de hasta 14 meses y en el que reparten alimentos para los más pequeños. También disponen de un centro de educación infantil, en el que acogen a niños de 1 a 3 años. Para adultos, cuentan con el servicio de Transeúntes, orientado a la acogida de personas en el refugio, la entrega de ropa y alimentos a familias desfavorecidas o el consultorio médico.