La Federación de Regantes del Ebro (Ferebro) ha asegurado hoy que en el proceso de elaboración del Plan Hidrológico de la Cuenca participaron también usuarios, expertos y administración de Cataluña.

Con esta afirmación, los regantes de la Cuenca del Ebro salen al paso de las manifestaciones vertidas desde la Generalitat para afirmar que Cataluña no fue consultada sobre el referido plan y reclamar unos caudales ecológicos distintos a los establecidos en el referido documento.

Para Ferebro, esta afirmación de las autoridades catalanas revela una "acusada miopía" respeto al proceso de participación llevado a cabo para la elaboración del plan.

"Cataluña -subrayan los regantes- contó en la tramitación del Plan Hidrológico del Ebro con un proceso de participación propio en el que 613 personas (particulares, administración, investigación y sectores productivos) presentaron 330 propuestas, de las cuales tan sólo 15 no fueron aceptadas".

Advierten, además, que si el Gobierno catalán "persiste en su empeño de salir de los cauces legalmente estipulados" y establecidos en el Plan Hidrológico de Cuenca, "será necesario recordarle que la fijación de los caudales ambientales debe realizarse con la participación de todas las comunidades autónomas y usuarios".

Los regantes del Ebro responsabilizan a la Generalitat de ofrecer una "imagen distorsionada" del documento hidrológico, y sostienen que esta situación "no debe dejarnos engañar pues esconde intenciones que posiblemente nada tengan que ver con el propio Plan y que quedan por sí mismas descalificadas dado su marcado talante antidemocrático".

A su juicio, "discriminar, dentro del Valle del Ebro, donde está probado el alto valor añadido de la producción agraria, qué hectáreas son prioritarias y cuales no en función de un criterio meramente territorial es una cuestión que llevada al plano político podemos tildar sin rubor de demagogia, y de una forma más serena de frivolidad".

Afirman que mientras otros territorios apuestan por la modernización y reservan recursos para explotaciones de pequeño tamaño, Cataluña presenta un plan que plantea la creación de 154.000 nuevas hectáreas que les lleva a demandar que se dupliquen los caudales ecológicos en el Delta.

Una demanda que, en opinión de los regantes del Ebro deja en una situación "precaria" al resto de las comunidades autónomas de la cuenca.