Las regiones de ambos lados del Pirineo se han unido para proteger el hábitat de las aves necrófagas bajo el proyecto europeo "Ecogyp", que se puso en marcha el pasado mes de noviembre con el objetivo de fortalecer la cohabitación entre las personas y estas rapaces.

Se trata de un proyecto transfronterizo, financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y enmarcado en el Programa Interreg V-A España-Francia-Andorra (POCTEFA 2014-2020), encaminado a promover la protección, la valorización y el uso sostenible de los recursos locales.

El proyecto tiene un presupuesto concedido de 2.188.765 euros, financiado al 65 % por los fondos FEDER (1.422.697 euros), mientras que Navarra aporta 228.317 euros, informa el Gobierno foral en un comunicado.

En Ecogyp participa el Gobierno de Navarra como "jefe de fila", junto a la Diputación Foral de Álava, la Fundación Hazi, la Diputación Foral de Gipuzkoa, la Ligue pour la Protection des Oiseaux (LPO), la Fundación Catalunya La Pedrera y la Diputación General de Aragón.

La colaboración entre las administraciones y las regiones para preservar la biodiversidad en los Pirineos data de tiempo atrás, pero el valor añadido que aporta Ecogyp es que por primera vez todas las regiones que ocupan la zona pirenaica (desde el Mediterráneo al Atlántico) trabajan de manera conjunta para desarrollar un marco común de gestión sostenible de rapaces necrófagas.

Las aves necrófagas incluidas en el proyecto son el quebrantahuesos, alimoche común, milano real, buitre leonado y buitre negro, que están seriamente afectadas por amenazas como envenenamientos, molestias humanas en las zonas de nidificación, electrocución y colisión, deterioro del hábitat y disponibilidad de comida, entre otras.

Todas ellas son aves longevas, que empiezan a reproducirse tarde (de 5 a 8 años) y con bajas tasas de productividad al año, por lo que cualquier causa no natural que aumente la tasa de mortalidad en edad adulta o que disminuya las tasas de productividad constituye un grave problema de conservación.

Entre las actuaciones comprendidas en el proyecto, Navarra ya ha comenzado el seguimiento de la reproducción y el censo de la población de quebrantahuesos, y este 2017 se realizará la de milano real y alimoche.

Además, se ha marcado y colocado seguimiento por GPS a un ejemplar adulto de quebrantahuesos, que proporciona información sobre su ubicación y sobre el uso del espacio de estos animales.

También se estudia el hábitat que utilizan estas aves para alimentarse.

Por otro lado, Navarra dirige la mesa de trabajo sobre la estrategia de gestión de la alimentación suplementaria de aves necrófagas. Además, realizará un diseño del manual de buenas prácticas ganaderas y está efectuando un estudio de la incidencia de las actividades de ocio o deportivas en la reproducción de estas rapaces.

Otra de las actuaciones incluidas en el proyecto es el análisis de los ejemplares encontrados muertos o capturados, con el fin de caracterizar el índice de contaminación por plomo que pueden tener las poblaciones de aves rapaces en el Pirineo.