Los brotes de tos ferina vuelven a aumentar. Tras un 2012 en el que tan solo hubo tres, en lo que va de año ya se han investigado diez, según el último boletín epidemiológico del Gobierno de Aragón que presenta los resultados de esta enfermedad del último decenio.

Desde el 2004, en Aragón se han atendido 166 casos de los que el 88,6% han sido en Zaragoza y, principalmente, en menores de edad. Representan el 41% de los enfermos por esta patología.

Fue en el 2011 cuando se produjo el mayor pico en la comunidad de los últimos diez años --el periodo analizado por Sanidad--, con un total de 44 brotes. 147 se han registrado en Zaragoza y 19 en Huesca.

Durante este 2014, de los diez brotes que se han investigado, nueve han sido en Zaragoza y uno en Teruel. Es la primera vez desde el 2004 que se produce un caso de tos ferina en la provincia turolense.

Según la DGA, todos han sido en el ámbito familiar por su rápida propagación ya que el contagio se realiza directamente desde la persona enferma a la sana por el aire. En total, se han contabilizado 25 casos.

Aunque este año haya más brotes que en los dos últimos, nada tiene que ver el número con el 2011 (44), el 2007 (30) o el 2005 (26).

Esta enfermedad infecto-contagiosa aguda que afecta al aparato respiratorio y se manifiesta con una tos continuada afecta principalmente a menores de edad. El 67,41% de los casos se presenta en niños de 0 a 4 años. Y un 37,22% en menores de entre 10 y 14 años. La incidencia en adultos entre los 40 y 64 años es de un 12% y en mayores de 65 prácticamente es nula.

El periodo de incubación dura entre una y dos semanas. Igual que el periodo catarral.