Los aragoneses pueden presumir de ser pioneros en la puesta en marcha del rescate medicalizado en montaña y con muy buenos resultados". Así de satisfecho se muestra Javier Marión, gerente del 061 de Urgencias Sanitarias en Aragón, al hacer balance de la actividad de este servicio después de cinco años con un total de 1.073 asistencias. Esta prestación sigue además una tendencia ascendente ya que a lo largo del 2003 ha crecido hasta un 25% respecto al 2002, al pasar de 213 a 283 rescates medicalizados.

Su existencia, sin duda, ha salvado más de una vida y en condiciones extremas: Atender un infarto de miocardio en un montañero en plena ascensión, reanimar a barranquistas ahogados, estabilizar politraumatismos en un saliente de montaña o atender a un esquiador inconsciente en medio de la nieve antes de evacuarlo.

"Siempre hay un médico preparado para subir al helicóptero de la Guardia Civil cuando hay una emergencia en montaña. Y los aragoneses podemos felicitarnos porque la nuestra ha sido la primera comunidad autónoma de España en implantar los rescates medicalizados y con muy buenos resultados, algo que algunos ya han comenzado a imitar", señala.

De hecho, Aragón medicaliza el 85% de los rescates en montaña, un porcentaje muy por encima de los realizados por los Servicios de Rescate de Chamonix (el Servicio Europeo más activo con 1.200 rescates al año) que medicaliza el 70%.

ASISTIR AL HERIDO El objetivo de la medicalización es acercar al accidentado los medios de reanimación avanzada, así como proporcionar los primeros cuidados médicos durante su traslado hasta el destino adecuado, una actividad que actualmente desarrolla el 061 de Aragón, en colaboración con el helicóptero de la Guardia Civil. Claro que el médico que acompaña al socorrista de las Fuerzas Armadas acaba ayudando en todo lo necesario cuando lo que prima es el rescate. "En ocasiones hay que entresacarlo de unas rocas y un río en las que ha quedado atrapado cuando hacía barranquismo, o se ha despeñado cuando intentaba una escalada. La participación del médico trasciende por tanto la prestación sanitaria", apunta el responsable del 061.

Hoy la plantilla de profesionales del rescate medicalizado la componen ocho médicos, cuya sede es la Unidad Medicalizada de Emergencia de Sabiñánigo (Huesca). Cada día hay dos médicos de guardia: Uno, en Sabiñánigo, junto a una enfermera, un conductor y un técnico para salir con la UVI móvil, y otro médico, que permanece de guardia física en el Hospital San Jorge de Huesca, y que es el que se activa para salir con el helicóptero de la UHEL-41 de la Guardia Civil cuando surge un rescate en montaña. Según las características del accidente, sale únicamente la UVI móvil, y en otras, los dos medios conjuntamente.

Esta medicalización del rescate la desarrolla el 061 desde que acogiera en su estructura al antiguo Servicio Aragonés de Medicina de Urgencia en Montaña (SAMUM) en noviembre del 2002, una vez asumidas las competencias sanitarias por el Gobierno aragonés.

No obstante, y aunque la principal actividad del helicóptero de la UHEL-41 y del médico del 061 que participa en estas acciones es el rescate en montaña, la UME de Sabiñánigo también atiende accidentes laborales y enfermedades médicas surgidas en el entorno de la montaña y sus núcleos de población. El número de rescates medicalizados en montaña en Aragón en los últimos cinco años asciende a 1.073. La cifra ha ido aumentando anualmente desde que se comenzara con esta actividad en agosto de 1999, con 164; en el 2000, 187; en el 2001, 227; en el 2002, 213 y en lo que va del 2003, 283 rescates. "En este último año, el crecimiento ha sido de un 25%", señaló Marión.

De cada tres heridos rescatados en montaña, dos son hombres y una mujer; la mitad de ellos, con edades comprendidas entre los 26 y los 45 años, que suelen accidentarse más en verano con actividades deportivas relacionadas con el montañismo, el barranquismo y el senderismo, entre otras. Las caídas con deslizamiento representan hasta un tercio de todas las causas de los accidentes, seguidas por los extravíos --frecuentes al recoger setas y caracoles--; por las caídas con precipitaciones y las torceduras.

En algo más de la mitad de los rescates ha sido necesaria la intervención del helicóptero medicalizado, mientras que en otro tercio han colaborado tanto medios terrestres como aéreos. El hospital San Jorge es el dispositivo sanitario que asiste al 42% de los heridos, tras una primera asistencia presencial en el lugar del rescate. El resto se distribuye entre hospitales y centros de salud de la comunidad.

Las fracturas, la enfermedad --como agotamiento, hipotermia, infarto de corazón--, traumatismos, esguinces y luxaciones son las principales patologías observadas entre los heridos.