El desalojo de las dependencias de la comisaría de distrito de Centro del Cuerpo Nacional de Policía, en la zaragozana calle de Ponzano, previsto para el próximo 2 de enero, se retrasará al menos medio mes debido a que la Jefatura Superior no ha cumplido con el plazo para para ejecutar las obras de su nueva instalación, en el cuartel de la calle del General Mayandía.
Inicialmente, la propiedad del edificio de Ponzano había emplazado a la Policía para su desalojo el próximo lunes, fecha en la que estaba previsto que la comisaría pasara a ocupar las dependencias de la antigua sede de la Brigada de Extranjería. Sin embargo, la demora en la nueva ubicación de esta unidad policial en el antiguo Parque Móvil de Ministerios ha obligado a revisar las fechas.
El edificio de la calle Ponzano, ocupado por la Policía desde 1931, pasará a albergar en las próximas semanas una boutique de ropa de moda, de la firma Máximo Dutti.
Fuentes policiales consultadas por este periódico manifestaron ayer su dudas de que la Jefatura Superior pueda cumplir con la nueva fecha fijada para el desalojo, el próximo 15 de enero. "Aunque se realizan obras en las futuras dependencias desde hace varias semanas. los trabajos están muy retrasados. Falta por construir la instalación de aire acondicionado y los calabozos para detenidos, además de colocar el cableado de los sistemas informáticos", señalaron.
CALABOZOS Estas fuentes explicaron que, aunque podrían utilizarse las celdas de la Jefatura por su proximidad, "no parece práctico que los detenidos estén trasladándose continuamente de edificio cada vez que lo requieran los grupos de investigación".
En las dependencias todavía se conserva parte de la Brigada de Extranjería, que no podrá ser trasladada a la nueva sede hasta mediados del 2005. Para acelerar las obras, las instalaciones se han ubicado provisionalmente en los sótanos del cuartel, ocupados anteriormente por las oficinas del DNI.
El cambio de sede de Extranjería todavía no ha sido asumido por los ciudadanos que requieren de este servicio, inmigrantes que todavía se dirigen a las antiguas oficinas, donde siguen produciéndose colas para recabar información. Para agilizar los trámites, la Policía ha puesto en marcha un teléfono, el 976 98 00 20, al que pueden recurrir los inmigrantes para realizar sus consultas y evitar las aglomeraciones.
