Los vecinos y transeúntes del entorno del paseo Teruel de Zaragoza se vieron sorprendidos a media tarde de ayer por el reventón de una tubería en la calle Cánovas, justo en la confluencia con la calle Princesa.

La incidencia, que se produjo sobre las 18.00 horas, originó la salida de agua y barro a borbotones, lo que anegó e hizo impracticable la calzada. Hasta ese punto de la ciudad se trasladaron dos patrullas de la Policía Local, que procedieron a cortar el tráfico rodado bloqueando el paso con sus coches patrulla, mientras los técnicos municipales se acercaron a cerrar las llaves de paso y varios efectivos del servicio de limpieza urgente del Ayuntamiento de Zaragoza procedieron a retirar el barro del asfalto. El agua, en todo caso, no llegó a afectar a las estrechas aceras de la calle.

Según informaron fuentes municipales, la escasez de luz por lo avanzado de la tarde obligó a posponer los trabajos de reparación de la tubería y la previsión es que a lo largo del día de hoy se proceda a abrir la calzada para localizar la fuga y proceder a la sustitución de ese tramo de conducto.

Los vecinos de esa parte de la ciudad están acostumbrados últimamente a ver zanjas en varias de sus calles. Durante los meses del pasado verano, se llevaron a cabo los trabajos de rehabilitación y acondicionamiento de la mitad de la calle Carmen --la otra quedó pendiente por no contar el ayuntamiento con fondos disponibles-- y las obras para la instalación de gas.