Tres nuevos reventones de tuberías se suman a la lista de las últimas semanas. Las calles Oviedo (Torrero-La Paz), Pablo Gargallo (Almozara) y Reina Fabiola (centro) sufrieron cortes de agua como consecuencia de la rotura de la red de suministro. La semana pasada hubo tres incidencias y, en julio, otras dos.

La incidencia más grave se produjo en la calle Oviedo al mediodía. Una rotura en una cañería de fibrocemento de 200 milímetros, a la altura del número 183, frente al instituto Blecua, se reventó y provocó el corte del agua de un tramo de la calle y la plaza Gallur. "Esta tubería abastece a buena parte de la zona", según indicaron desde el Ayuntamiento de Zaragoza.

Hasta última hora de la tarde no recuperaron el servicio. Las brigadas pusieron a disposición de los vecinos una toma a la altura del número 84 que se convirtió en el punto de encuentro de los vecinos de la zona que llenaban cubos y garrafas de agua.

Hasta cuatro bares se vieron afectados. En la cafetería La Paz explicaron que al no disponer de agua, se vieron obligados a hacer el café descafeinado y calentarlo en el microondas.

Las brigadas municipales de conservación comenzaron los trabajos de reparación a las 14.00 horas. La Policía Local tuvo que cortar el tráfico entre la Cuarta Avenida y el cruce con la calle San Antonio de Padua y se desviaron las líneas de bus 23, 31 y C4.

En la Almozara, en la calle Pablo Gargallo en el tramo comprendido entre Puerta Sancho y los Jardines de Lisboa, reventó una tubería de PVC. Tres bloques de viviendas se quedaron durante horas sin suministro de agua. Hasta la calle se acercó la empresa de conservación de zona para solucionar el incidente.

La excepción del día de ayer fue en la calle Reina Fabiola. Debido a los trabajos que estaban practicando una empresa de la zona se rompió la boca de agua entre Gonzalo de Berceo y Lorenzo Pardo. En este caso, según informaron desde el consistorio, fue la propia empresa la que se hizo cargo de la reparación con la supervisión de los técnicos municipales.

Desde el ayuntamiento insisten en que es normal que en verano se repita este tipo de sucesos ya que, al haber menos consumo de agua sube la presión de la red. A pesar de que se controla desde la salida de la potabilizadora, puede subir hasta un 20% provocando las roturas.

Principalmente se producen en tuberías de fibrocemento, las más antiguas. De hecho, se dejaron de utilizar ya en los años 80. En enero había registrados 291 kilómetros de este material de los 1.288 que tiene la red de suministro de agua.

La semana pasada se produjeron dos roturas en el paseo María Agustín, a la altura de la Jefatura Superior de Policía, que originó un corte de agua de más de 24 horas. También en la calle Rioja y en Melilla se produjeron roturas. Todas eran de fibrocemento.