El rey Felipe VI ha presidido este miércoles la entrega de reales despachos a 406 nuevos oficiales del Ejército de Tierra y de la Guardia Civil que han completado su formación en la Academia General Militar de Zaragoza, cuando se cumplen 30 años de su salida como teniente de este mismo centro.

Fue el 13 de julio de 1989 cuando don Felipe recibió de manos de su padre, el rey Juan Carlos I, el despacho de teniente de Infantería, según ha recordado en su alocución el director general de la AGM, Carlos Melero, en el mismo lugar en el que hoy lo han recibido 406 nuevos oficiales, 382 hombres y 24 mujeres.

Felipe VI ha llegado al patio de armas de la AGM a las 12.00 horas, donde se ha disparado una salva, y ha pasado revista a las tropas antes de saludar a las autoridades presentes en el acto.

Le han acompañado el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, Francisco Javier Varela; el general director de la Academia y comandante militar de Zaragoza y Teruel, Carlos Melero; el director de la Guardia Civil, Félix Azón; el presidente de Aragón, Javier Lambán; el de las Cortes, Javier Sada; el Justicia de Aragón, Ándel Dolado; la delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, y el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, entre otros.

En total se han entregado reales despachos a 406 nuevos tenientes (dos de ellos alumnos de Jordania), de los que 162 eran de la Guardia Civil.

Don Felipe ha sido el encargado de entregar los diplomas y las cruces del mérito militar y de la Guardia Civil a los mejores expedientes de cada una de las promociones: Gonzalo Echevarría Moreno, de Infantería; Antonio López Añón, de Caballería; Juan Felipe Enriquez Medina, de Infantería; Rodrigo Sellés Tomás, de Artillería; Ignacio Sanclemente Zúniga, de Intendencia, y José Manuel de la Peña Real, de la Guardia Civil.

Posteriormente, han recibo sus despachos el resto de alumnos en presencia de 1.437 alumnos en formación en el patio de armas, algunos de los cuales se han desvanecido por el calor.

En su alocución, el director de la AGM ha agradecido a don Felipe su presencia un año más en este acto y se ha referido a los "emotivos recuerdos" que ha podido tener de ese 13 de julio de 1989.

Melero ha resaltado que la enseñanza en la AGM busca "calidad" y las "más altas cotas de excelencia" y ha aseverado que los nuevos oficiales están "preparados para servir, con iniciativa y capacidad de decisión", en las unidades del Ejército y de la Guardia Civil.

Les ha recomendado que sean "perseverantes" en el cumplimiento de sus obligaciones, "íntegros y justos" en sus decisiones y que practiquen siempre el compañerismo y les ha pedido que se ganen "con el ejemplo" a los hombres y mujeres de las instituciones a las que pertenecen.

"La vida militar os exigirá sacrificios", ha concluido Melero, quien ha apuntado que también les proporcionará "innumerables satisfacciones" y les ha animado a disfrutar y, sobre todo, a "mantener siempre la ilusión".

Tras el discurso del director, se ha celebrado el homenaje a los que dieron su vida por España, y las tropas han desfilado por el recinto de la Academia.

Los oficiales que han concluido su formación han roto filas por última vez a las órdenes del rey y han lanzado sus gorras y tricornios al aire, como ya es tradición.

Ese ha sido el momento para que uno de los tenientes que han recibido los despachos ha elegido para pedir matrimonio a su novia, que ha aceptado el compromiso de casarse el próximo año.

La estancia de don Felipe en la capital aragonesa se alargará este miércoles para visitar, a las 17.00 horas, la sede de la Real Maestranza de Caballería con motivo de su 200 aniversario.

Felipe VI ostenta el cargo de Hermano Mayor de esta asociación desde que su padre, Juan Carlos I, pasase a ocupar el cargo de Hermano Mayor emérito.