De "desastre" define la Asociación Naturalista de Aragón (Ansar) la limpieza de riberas que actualmente se está llevando a cabo en el río Huerva a la altura del Parque Grande. "Esto está completamente pelado. Los operarios han arrasado con todo. Han arrancado hierbas, arbustos y todo lo demás, y tan sólo han respetado los árboles ya adultos. Hay que desechar la vieja idea de que los ríos son como los canales, porque no es verdad. En los ríos tiene que existir vegetación para que exista un corredor verde saludable", afirman sus responsables mientras observan la actuación realizada a la altura del puente 13 de Septiembre.

La campaña municipal de limpieza de las riberas del Canal Imperial y el río Huerva en sus tramos urbanos comenzó el pasado mes de mayo por parte de la contrata FCC. Con un presupuesto de 211.000 euros, es el primer servicio continuado que se pone en marcha en décadas en Zaragoza, y responde a una reivindicación histórica vecinal para atajar la suciedad que se acumulaba.

Hasta ahora, los trabajos en torno al canal no habían recibido crítica alguna. Sin embargo, es justamente este sector del río el que ha levantado ampollas entre los ecologistas.

LEY DE VIDA "Cuando se habla de limpieza, de lo que se trata es de retirar los residuos sólidos urbanos, y también de eliminar maleza, pero lo menos posible. Las riberas de los ríos necesitan de la vegetación para vivir, para que las aves y demás especies puedan moverse, desplazarse, alimentarse e incluso construir sus nidos", argumentan.

Desde la asociación Ansar se alerta también del peligro que supone que la tierra carezca de vegetación que la pueda sujetar en caso de fuertes lluvias.

El ayuntamiento, por su parte, en la presentación de la campaña ya avanzó que los objetivos marcados se centraban en retirar todo tipo de basuras y "desbrozar todos aquellos materiales que dificulten el paso y que se han convertido en un foco de suciedad o producen un aspecto visual negativo". Ya entonces, Ansar pidió precaución y que se tuvieran en cuenta parámetros medioambientales. "En principio, no se debería cortar ni desbrozar nada", lamentaron entonces.

Esta campaña de limpieza de riberas, calificada de "experimental" por parte del ayuntamiento, se está prolongando más de lo que se pensaba, ya que los trabajos están siendo más dificultosos en algunos tramos. Desde la Concejalía de Medio Ambiente se prevé que en un par de semanas concluya la primera ronda de actuación por todos los sectores y comience una segunda.