El exgerente de Plaza, Ricardo García Becerril, aseguró ayer que le da "risa" la tesis que maneja el juez que investiga el caso pagarés: Francisco Picazo, magistrado del Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza, sostiene en un auto conocido la semana pasada que existen "suficientes indicios" para apreciar la "razonable posibilidad" de que Agapito Iglesias se repartiera con él y con el exconsejero delegado de la empresa pública, Carlos Escó, los 14 millones en los que un informe perial cifra el sobrecoste de las obras de las naves de Autocity.

García Becerril compareció ayer ante el Juzgado de Instrucción número 5 para firmar su comparecencia semanal por el caso saqueo, en el que se encuentra en libertad provisional.

El próximo viernes, Agapito Iglesias declarará como imputado ante Picazo, que ya ha encartado en la causa tanto a García Becerril como a Escó. A estos últimos les imputa un delito societario genérico --la denuncia de Plaza habla de administración desleal y de malversación-- del que considera al constructor como cooperador necesario, aunque también aprecia en su conducta indicios de estafa.