La llegada del periodo estival al monasterio de Piedra, que este año ha cumplido 800 años desde su construcción, viene marcada este año por un aumento significativo del caudal del río Piedra que se ha cuadriplicado en el último semestre gracias a las abundantes lluvias. Según la Confederación Hidrográfica del Ebro, el 4 de enero el caudal del río era de 0,41m³/s y el nivel de 0,10m. A 21 de junio, en cambio, el caudal es de 1,61 m³/s y el nivel de 0,18m.

Además, las temperaturas templadas y las precipitaciones de la primavera han contribuido a una exuberante floración en el entorno del Piedra.

Esta temporada, el paraje natural cuenta con una exposición temporal de diferentes obras de arte y objetos relacionados con la historia del monasterio. Asimismo, se está desarrollando una muestra fotográfica sobre la historia del cenobio, algunas de ellas con un siglo de antigüedad.

En diferentes puntos del complejo, se han colocado paneles explicativos en los que el visitante puede ver cómo era este lugar histórico hace un siglo y comprobar que apenas ha cambiado desde entonces.