El consejero de Economía del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés, ha defendido hoy el cambio en la composición del consejo de administración de las sociedades municipales como una "aplicación estricta y legítima de la ley".

El consejero de Zaragoza en Común ha enviado este mensaje en una comparecencia a petición del PP en la Comisión de Pleno sobre Economía y Cultura, para que explique en qué afecta la Ley de Capitalidad aprobada por las Cortes de Aragón a la organización municipal del Ayuntamiento de Zaragoza.

Rivarés ha argumentado que con esta medida, que supone la reducción de la representación de la oposición a un consejero por grupo en los consejos de administración de las cuatro sociedades públicas zaragozanas, se pretende "hacer como en el resto de las grandes ciudades españolas".

Unas ciudades en las que, en palabras de Rivarés, "las sociedades públicas las gestionan la mayoría de los Gobiernos para poder gobernar y en las que tienen representación de los grupos".

Y en el caso de Zaragoza, "de paso evitar que se sigan bloqueando 46 propuestas de Gobierno, algunas compartidas en sus programas electorales y que han sido bloqueadas directamente", ha añadido Rivarés en alusión a lo que desde ZeC consideran como un "bloqueo" por parte de la oposición.

Pero para la concejala del PP, María Navarro, la Ley de Capitalidad ha servido como "excusa" para dar "un golpe en la mesa", que supone "que las decisiones sean por la mayoría absoluta de los miembros del Gobierno de la ciudad".

El concejal socialista Javier Trívez también ha mostrado sus discrepancias al considerar que desde ZeC "se han saltado los principios democráticos para poder hacer lo que les dé la gana y hacerse con el poder, algo que no les correspondía 'per se'", ha juzgado, ya que "tienen el 24 % de votos de la ciudad y sus concejales son el 29 %".

"Nadie que se llame demócrata puede validar lo que ustedes han hecho", ha reprochado por su parte la portavoz de Ciudadanos, Sara Fernández, quien ha juzgado que "lo que han hecho no es de izquierdas ni de derechas" ya que, en sus palabras, "el autoritarismo puede venir de cualquier tipo de justificación".

Y las reprobaciones han continuado con el portavoz de CHA, Carmelo Asensio, quien ha señalado que "ni la derecha más rancia y más reaccionaria se atrevería a hacer estas cosas" y ha afeado a ZeC que esta reestructuración en las sociedades es una "reacción de la impotencia e incapacidad para impulsar proyectos con el diálogo".