El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha prometido este martes que si logra gobernar tras las elecciones de abril pondrá en marcha un pacto de Estado contra la despoblación que "permanezca en el tiempo" y que incluya "inversiones y recursos" y cuya piedra angular sea la creación de empleo.

Rivera, en un día festivo en Zaragoza, ha viajado a la capital aragonesa para presentar al candidato a la presidencia del Gobierno de Aragón por la formación naranja, el periodista Daniel Calvo, que concurre como independiente después de lograr el respaldo del 80 por ciento de los militantes en las primarias recientemente celebradas en Aragón.

En una tierra donde la despoblación es intensa, Rivera ha insistido en que la primera medida contra este problema debe de ser "dejar de mentir a los ciudadanos", que es lo que a su juicio hacen quienes dicen que "en un cuarto de hora" se puede solucionar.

Se requiere, ha abundado, un plan de inversiones y recursos, con partidas fiscalizadas e infraestructuras, pero sobre todo con empleo para evitar que la gente se vaya y conseguir que vengan empresas.

Un plan que, ha dicho, hay que poner en marcha de la mano de agentes sociales, empresarios, sindicatos y entidades en general.

Rivera ha invitado a los alrededor de cuatrocientos asistentes al acto a votar un proyecto que "sabe generar empleo, que lideran personas que tienen experiencia en la gestión y que "no insultan a los empresarios", que son los que crean puestos de trabajo, ha advertido.

Gran parte de su intervención la ha dedicado el líder de Ciudadanos a criticar la deriva de los nacionalistas catalanes, pero también del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien a su juicio "tiene como objetivo dividir a los españoles".

Pero muchos de sus votantes, ha advertido, "no le van a perdonar" sus pactos con los nacionalistas.

A esos, y a quienes se sienten decepcionados con el PP, les ha reclamado el voto en las elecciones de abril, para superar esta "legislatura perdida en batallas identitarias" y dar paso a las soluciones.

Y es que, ha agregado Rivera, para ser presidente de España lo primero que hay que hacer es "defender la dignidad de tus ciudadanos frente a quienes los insultan", como ha asegurado que hizo el presidente de la Generalitat, Quim Torra, al poner encima de la mesa de negociación veintiuna medidas "de la vergüenza" ante las que cualquier mandatario "decente" no cedería.

"Si yo soy presidente, nunca habrá presidentes autonómicos insultando al resto, hay que pararles los pies a quienes se sienten superiores a los demás", ha insistido.

Ante todo ello, sus compromisos, ha detallado, pasan por no pactar con nacionalistas, sino solo con fuerzas que defiendan la Constitución; que en todas las escuelas públicas y concertadas, "sin ir a los juzgados y sin pagar dinero", se pueda estudiar con el español como lengua vehicular, y por que cualquier funcionario de cualquier lugar de España pueda circular y trabajar con libertad en el lugar del país donde decida, "ya sea Aragón, Ibiza, Alsasua, el pueblo de Torra o la plaza de Colón".

Rivera ha pedido finalmente apoyo a los asistentes, que no un "cheque en blanco", porque sabe que el voto es un derecho fundamental y su obligación es intentar presidir un gobierno "con los mejores".

"Cada vez más gente se acerca a Ciudadanos porque esta es la casa común del sentido común y de la igualdad" y "España merece que, desde el centro, desde la libertad y desde el respeto se construya un nuevo proyecto de país", ha zanjado Rivera.